Hoy los huilenses se preparan entre comidas, tradiciones, villancicos y reunión familiar para la Nochebuena, víspera del nacimiento del hijo de Dios.
María Alejandra Ruiz Mallungo
@amperiodista
La Nochebuena es una celebración profundamente arraigada en la cultura colombiana, marcada por tradiciones que unen a las familias en torno a la festividad del nacimiento de Jesús. Hoy, como cada 24 de diciembre, víspera de la Navidad, es decir, del nacimiento del hijo de Dios, las familias se reúnen para compartir una cena y celebrar el amor y la unidad, independientemente de su inclinación religiosa. En el Huila, como en el resto del país, esta noche es un momento especial que resalta la importancia de la familia y las costumbres.
Alrededor del pesebre
Una de las tradiciones más significativas de la Nochebuena en Colombia es la creación del pesebre, una representación del nacimiento del Niño Dios. Este elemento decorativo se convierte en el centro de atención en muchos hogares huilenses. Las familias suelen reunirse para armarlo, utilizando su creatividad para incluir figuras que representan ríos, ovejas y personajes locales, algunos incluso vestidos con trajes típicos de la región.
Rosa Cuéllar, neivana y quien aún mantiene vigente las tradiciones navideñas en la familia comenta: “Las navidades se pasan en familia. Nosotros nada de discotecas, ni salidas, toda la familia siempre reunida. El pesebre es algo muy sagrado en mi casa, nunca puede faltar, lo mismo que el árbol de navidad y claro la ida a la Santa Misa de la media noche”.
El pesebre no solo se encuentra en los hogares; también hay versiones a tamaño real que se instalan en parques y plazas, permitiendo que toda la comunidad disfrute de esta tradición. Estos espacios se convierten en puntos de encuentro donde las familias pueden admirar las creaciones artísticas mientras comparten un vino o galletas y esperan la medianoche para ser testigos del nacimiento de Jesucristo.
La cena navideña
La cena de Nochebuena es otro pilar fundamental de esta celebración. Aunque cada región tiene sus propias particularidades culinarias, en Huila es común disfrutar de un festín que incluye buñuelos y natilla, dos platos emblemáticos de la época. Rosa menciona que en su hogar se preparan dulces tradicionales como el “dulce de noche buena”, además de platillos como pavo relleno y otros manjares típicos. La diversidad cultural de Colombia se refleja en las variaciones gastronómicas que cada familia aporta a la mesa navideña.
La cena no solo es un momento para degustar deliciosos platillos; es también una oportunidad para fortalecer los lazos familiares. En muchas casas, el ritual comienza con oraciones y villancicos que celebran el nacimiento del Niño Jesús, creando un ambiente de alegría y gratitud.
Estrenar ropa
Una tradición curiosa pero significativa es el estreno de ropa nueva para Nochebuena. Este ritual implica que cada miembro de la familia use al menos una prenda nueva para celebrar la festividad. La búsqueda y compra de estas prendas se convierte en un evento familiar donde todos participan con entusiasmo. Rosa enfatiza la importancia de mantener estas tradiciones: “Es deber nuestro inculcar a nuestros hijos estas costumbres para que perduren en el tiempo”. Esta práctica no solo simboliza un nuevo comienzo, sino que también refuerza el sentido de pertenencia y continuidad cultural.
A medida que las familias se preparan para la Nochebuena, se hace evidente que estas tradiciones son más que simples costumbres; son un reflejo del amor y el compromiso hacia los seres queridos. La reunión familiar, el armado del pesebre, la cena compartida y el estrenar ropa nueva son elementos que contribuyen a crear recuerdos imborrables.
Rosa Cuéllar resume esta esencia al afirmar: “Las navidades se pasan en familia; nosotros nada de discotecas ni salidas”. Este enfoque resalta cómo, a pesar del avance del tiempo y los cambios sociales, la Nochebuena sigue siendo un momento sagrado dedicado a la familia y a las tradiciones que definen a los colombianos.
La Nochebuena en Colombia y en el Huila, es una celebración rica en simbolismo y tradición. A través del pesebre, la cena navideña y el estreno de ropa nueva, las familias no solo celebran el nacimiento del Niño Jesús, sino que también reafirman sus vínculos afectivos y culturales. Estas prácticas son testimonio del valor que los colombianos otorgan a sus raíces y a la unión familiar durante esta época tan especial del año.