El presidente de Estados Unidos, Barack Obama dijo que “no hay ningún motivo” para que su país e Irán no sean amigos, en tanto llamó a una mayor libertad para los iraníes. WASHINGTON (AFP) El presidente de Estados Unidos, Barack Obama dijo que “no hay ningún motivo” para que su país e Irán no sean amigos, en tanto llamó a una mayor libertad para los iraníes. En un video en ocasión del Año Nuevo persa, Obama señaló que “no hay ningún motivo para que Estados Unidos e Irán estén divididos” y agregó que “al pueblo iraní se le niega la libertad básica de acceder a la información que quiere”. “Para el pueblo de Irán esta conmemoración coincide con un período de continua tensión entre nuestros dos pueblos”, señaló el presidente, remarcando la ausencia de libertades fundamentales en Irán. “Con Facebook y Twitter, los teléfonos móviles e Internet, los ciudadanos de ambos países recurren a los mismos medios para comunicarse”, pero los iraníes no gozan de la libertad necesaria para concretarlo, remarcó el presidente. En Irán “existe una cortina de hierro electrónica”, subrayó Obama. “El gobierno censura Internet para controlar lo que los ciudadanos pueden ver y decir” y “controla las computadoras y los teléfonos móviles con el único objetivo de proteger su propio poder”, agregó. En momentos en que Irán se encuentra sometido a fuertes sanciones económicas de parte de la comunidad internacional debido a su controvertido programa nuclear, Obama evocó el martes, sin precisar detalles, la adopción de “nuevas normas para facilitar la entrega a las empresas estadounidenses en Irán de programas informáticos y servicios con el fin de que los iraníes accedan más fácilmente a Internet”. El Departamento del Tesoro comunicó posteriormente una lista de programas gratuitos cuya difusión es admitida en Irán, tales como Yahoo Messenger y Google Talk, o lectores de documentos como Acrobat. Aludiendo a las revueltas que estallaron en el mundo árabe-musulmán a comienzos de 2011, y cuya expansión fue atribuida en parte a las redes sociales, Obama dijo que “el año pasado, nos dimos nuevamente cuenta de que nunca se logra hacer desaparecer una idea mediante la represión”. “El gobierno iraní tiene la obligación de respetar estos derechos (de acceso a la información), al igual que tiene la obligación de respetar sus obligaciones (en relación a) a su programa nuclear”, apuntó el presidente estadounidense, para quien si Teherán asume una conducta “responsable” será “nuevamente acogido en la comunidad internacional”. Esta es la cuarta ocasión desde su llegada al gobierno a comienzos de 2009 que Obama pronuncia un discurso al celebrarse el Año Nuevo iraní. En aquella oportunidad inicial, tomó la iniciativa histórica de dirigirse directamente a los dirigentes iraníes, a quienes ofreció dejar atrás tres décadas de relaciones hostiles. Pero el tono ya había cambiado un año después, con la cuestionada reelección del presidente Mahmud Ahmadinejad, a mediados de 2009. Tras la represión por el régimen iraní de manifestaciones convocadas para protestar por supuestos fraudes en esa consulta, Obama afirmó que Teherán había “optado por aislarse”. En 2011, el presidente estadounidense también fustigó a Teherán por reprimir a la oposición, una actitud que -dijo- demostraba el “miedo” del gobierno de la república islámica.