Luego de culminado el cese al fuego entre el Gobierno y el Eln, las Fuerzas Militares reactivaron operaciones contra esta organización al margen de la ley. En las últimas horas, se registraron fuertes combates en zona rural del municipio de Sardinata, en Norte de Santander. En los enfrentamientos, el Ejército abatió a cuatro presuntos guerrilleros.
Las Fuerzas Militares dieron a conocer que en las últimas horas hubo combates con integrantes del Ejército de Liberación Nacional (Eln) en Norte de Santander, donde cuatro guerrilleros murieron y uno más terminó gravemente herido.
Estos combates se dan después de que el Gobierno Nacional y la delegación del Eln no llegaran a un acuerdo para descongelar la mesa de diálogos y además de eso prorrogar el cese al fuego.
Los combates
De acuerdo con información oficial, los combates se registraron en los límites entre los municipios de Sardinata, Ábrego y Bucarasica. ”La operación se enmarca en los esfuerzos continuos por desarticular las estructuras del Eln en esta región del país, que ha sido históricamente afectada por la presencia de grupos armados. Las autoridades continúan en alerta ante posibles represalias y refuerzan la seguridad en la zona”, informaron las autoridades.
De igual forma, en medio de la operación, las autoridades incautaron abundante material de guerra, explosivos, equipos de comunicación y panfletos, entre otros.
El tira y afloje
Las acciones ofensivas por parte de las Fuerzas Militares en contra de ese grupo guerrillero se retomaron el pasado sábado 3 de agosto, luego de que terminara el cese al fuego entre ambos bandos en el marco de las negociaciones para buscar la paz.
Durante todo el proceso de posible reanudación de diálogos entre ambas delegaciones, el Eln dio un ultimátum para que se cumpliera su demanda, la cual insistía en su exclusión de la lista de GAO para continuar la negociación y extender el cese al fuego, de lo contrario, amenazaba con no continuar con los diálogos de paz.
Sin embargo, en ese mismo momento, fue el mismo alto comisionado de Paz, Otty Patiño, quien dejó claro que esa decisión no está en manos del Ejecutivo, sino que requeriría la aprobación de una ley en el Congreso. “Es suficiente lo que ya se ha hecho en considerarlos un GAO al margen de la ley, que es de alguna manera lo que lo caracteriza como un actor político. Llamarlos un grupo armado rebelde, o cualquier otra denominación, significaría algo que depende del Congreso y no del presidente de la República”, explicó en su momento.
La “propuesta confidencial”
Una vez conocida la exigencia del Eln, el Gobierno Petro presentó a esta guerrilla una “propuesta confidencial” para avanzar en los diálogos y prorrogar el cese al fuego. Sin embargo, este ofrecimiento no fue bien recibido por la organización al margen de la ley.
De hecho, el pasado 26 de agosto, la delegación del Eln escribió en sus redes sociales: “Hasta última hora del 23 de agosto nada que se hizo público el decreto Presidencial que retirara al Eln de la lista de los GAO. ¿Quién podrá quedar con ganas de seguir firmando acuerdos? Si los gobiernos cumplen tendrán en el Eln un interlocutor para continuar las conversaciones”.
La realidad
La única realidad es que la crisis en la mesa de negociaciones entre ambas delegaciones se mantiene. A su vez, hasta el cierre de esta edición, no se conoce ninguna reacción del Eln sobre lo ocurrido en Norte de Santander.