El dedo en la llaga
El pasado lunes 14 de marzo a través de redes sociales, se invitó al “día del no tanqueo” con la clara finalidad de protestar por los altos precios de la gasolina. En este espacio ya habíamos hablado de lo costosa que resultaba el combustible y cada tres meses o menos el Gobierno Nacional aumenta 100 pesos sin que nosotros hagamos nada al respecto. Por lo pronto me uní al día de no echarle gasolina al carro. Los noticieros le hicieron seguimiento a la pacifica protesta, y la conclusión fue que efectivamente se golpeó de alguna manera al distribuidor minorista, sin embargo, y a pesar del relativo éxito de la rebeldía, esa no es la solución. En primer lugar la palabra la tiene el Ministerio de Minas y Energía, quien tiene la fórmula para recalcular el verdadero valor. En segundo lugar, la vocería la tiene el Ministerio de Hacienda quien debe revaluar todos los impuestos que rodean la gasolina, porque hay sobretasa a la sobretasa, lo que hace más cara la gasolina. A estos dos ministerios le corresponde tomar las decisiones de fondo, aunque siempre salgan muy orondos diciendo que los aumentos se derivan de los altos precios internacionales, lo cual es una clara mentira. Suban o bajen los precios del crudo a nivel internacional, el valor de la gasolina siempre vive aumentando en nuestro país. Además, cuando se va a otros países y se producen aumentos del petróleo en el mercado internacional el galón de gasolina mantiene el mismo precio como en Estados Unidos. En Colombia el precio ya ronda los $9.000, esos son 5 dólares, lo cual es inconcebible. Eso es gasolina cara para las estadísticas del continente, lo cual a su vez se traduce en mayor inflación, recae sobre los alimentos, el transporte, en fin sobre la vida de todos los colombianos, por tal razón, hay que exigirle al Gobierno que piense sinceramente en los más pobres y la forma de hacerlo es empezando por los costos de los combustibles. Atlético Huila. Nuestro equipo de fútbol con su empate ante El Envigado mantuvo el liderato del primer campeonato de la Dimayor del año, ojala siga por ese sendero y que lleguemos a la tercera final en nuestros veinte años de historia y ahí como dice el dicho popular, la tercera es la vencida. Lo único que opaca el camino es la noticia de que a los jugadores hace mes y medio no les pagan, entonces hay que ponerse al día.