La Nación
Politólogos, al rescate… 1 16 octubre, 2024
COLUMNISTAS OPINIÓN

Politólogos, al rescate…

En esta confusión que nos encontramos en el campo de la política, dados los virajes que han dado las diferentes comunidades o sociedades ante el hartazgo de los gobernantes de partidos y movimientos políticos tradicionales, como de los alternativos que no cristalizaron sus ideales o no los aterrizaron en la práctica a la solución de los problemas públicos concretos, o que no han podido hacerlo por su arrogancia salida de contexto en la búsqueda de una democracia inclusiva (ya no deliberativa, representativa o participativa como lo plantea el argentino Roberto Gargarella); se requiere el rol protagónico de los politólogos para que nos ayuden a encauzar en las aspiraciones de lograr el sendero de un Estado con una masa crítica que pueda visibilizar y definir una agenda común y consensuada para transitar por el desarrollo anhelado. Que incluya a todos. Sin importar su pensamiento político.

Es decir, la sombra oscura se presenta, porque los ciudadanos o habitantes de un Estado estamos confundiendo conceptos, que lejos de unirnos, nos conducen a la polarización cada vez más. Cómo no entendemos, desde la argumentación o de la hermenéutica lo que significa, a manera de ejemplo, un término o vocablo propio del mundo de la política, el poder, partidos políticos, sistema y régimen político; no delimitamos quién es quién ni quién es qué.

Por ejemplo, si un gobernante o candidato es de izquierda, de derecha, neoliberal, populista, etc. No lo tenemos claro. Ni siquiera el mismo gobernante o político. Mucho menos el pueblo. Para lograr esa claridad, es el llamado a los buenos cientistas políticos o politólogos para que realicen pedagogía masiva sobre cómo funcionan las estructuras sociales y políticas, cómo se toman las decisiones en estos campos y lo que significan los tecnicismos aquí esbozados. Estamos llegando al colmo de ofensas y hasta de muerte si se le dice que es de izquierda o de derecha a alguien. O si es conservador o liberal. Ya nos estamos más que pasando. Reina la intolerancia por ello. Esto lo está encabezando hasta el presidente de la república que está abusando de la dignidad presidencial, figura o símbolo que debe representarnos a todos en el sueño de la nación dentro y fuera mientras gobierna. No solo de los que votaron por su proyecto. Recordemos nuestro pasado o décadas posteriores al Bogotazo.

En ese orden de ideas, cada politólogo o estudiante de esta carrera, o quienes estemos llamados a la comprensión de ésta área del conocimiento, tenemos un reto gigantesco para superar este oscurantismo y navegar por la comprensión de las siguientes categorías conceptuales como son el liberalismo, conservadurismo, autoritarismo, mayoritarismo, contramayoritarismo, totalitarismo, populismo, colonialismo, patrimonialismo, socialismo, fascismo, caudillismo, neoliberalismo, republicanismo, imperialismo, presidencialismo, parlamentarismo, consenso moral y político, dialéctica del consenso y el conflicto, prepotente- amigo, oponente- enemigo, derecha, izquierda, centro, democracia, tecnocracia, dictadura, golpe de Estado, clivajes, ideología, alienación, élites, poder y dominación. No más. S.O.S