Falencias técnicas en los diseños iniciales del ambicioso proyecto que busca cambiarle la cara al Malecón del río Magdalena en Neiva, tienen paralizadas las obras hace más de un mes. Artesanos y comerciantes que salieron del sector hace seis meses con la promesa de que serían reubicados prontamente, urgen un nuevo espacio para trabajar.
Lucía Sánchez
Las obras en El Malecón del río Magdalena, en el marco del proyecto que busca rescatar el turismo en la ciudad de Neiva, se encuentran suspendidas hace mes y medio, mientras artesanos y comerciantes del sector reclaman un espacio de reubicación para trabajar pues se encuentran a la deriva desde mayo.
Al cierre del año anterior, los entonces, alcalde de Neiva Rodrigo Lara Sánchez y gobernador del Huila Carlos Julio González Villa, confirmaron que las obras de recuperación del Malecón habían quedado contratadas y empezarían a ejecutarse en enero de este año, sin embargo, el inicio de las mismas se dio en junio y tres meses después fueron suspendidas por falencias técnicas en los diseños iniciales.
El director del Departamento Administrativo de Planeación del Huila, Carlos Alberto Cuellar Medina, aseguró que las obras iniciaron después de lo previsto por dos motivos: la llegada de la pandemia que obligó a diseñar protocolos para el área de trabajo y porque debía realizarse un proceso de socialización con los comerciantes que se encontraban en el lugar, pero tres meses después los trabajos fueron suspendidos por falencias técnicas en los diseños del proyecto.
“El proyecto está suspendido porque hubo unas inconsistencias en los estudios y diseños que se presentaron durante la fase contractual, evidenciadas tras una verificación tanto de la supervisión como de la interventoría en campo”, aseveró el funcionario.
Las falencias técnicas
Una de las falencias halladas en los diseños del proyecto radica en que “no se tuvo en cuenta todo el sistema radicular de la zona, en la cual hay una gran cantidad de árboles. Por esto se requiere tener en consideración un nuevo diseño estructural para evitar impactar toda la zona de ronda en cuanto a vegetación se refiere”, explicó Cuellar Medina.
Agregó el director del Departamento de Planeación, que otra falencia encontrada en los diseños del proyecto “es que la localización geoespacial del mismo no está adecuadamente armonizada con la realidad de campo, lo que motivó una rotación en el diseño, para poder garantizar su ajuste en el área que está disponible para ejecutarlo”.
El inicio de las obras se dio en junio, pero tres meses después fueron suspendidas por falencias técnicas en los diseños iniciales.
Otro aspecto que no se tuvo en cuenta y que también es muy importante, resaltó el funcionario, el cual quedó establecido en un contrato desde el año pasado, “es el hecho de que no tuvieron en consideración las acometidas de servicios públicos, cuando se pretende tener unas zonas de servicios dentro del área de uso público. Asimismo, se piensa hacer un ejercicio de rehabilitación de los quioscos de artesanos. Quedó sin cuantificar para esas estructuras todo lo que tiene que ver con las acometidas que son obligatorias para que quede funcional el proyecto”, puntualizó.
Cuellar Medina precisó que por esas razones se suspendieron las obras y en este momento se están recalculando los cambios que se deben hacer para poder darle continuidad al proyecto. Es de resaltar, que los estudios de la obra estuvieron a cargo de la Administración Municipal saliente y la contratación del proceso se hizo en el Gobierno Departamental anterior.
“Lo que hicimos para desarrollar un ejercicio apropiado fue suspender las actividades hasta tanto se aclaren esas falencias técnicas en los diseños y así poder ejecutar el proyecto de la mejor manera y de tal forma que quede funcional. En este momento la interventoría, la supervisión y el contratista están haciendo un trabajo de verificación y recalculo de algunos ítems y actividades, que, o no quedaron previstas o estaban inadecuadamente calculadas en los diseños iniciales”, subrayó.
Al mismo tiempo, el funcionario recalcó que se propende por la funcionalidad del proyecto y no generar un impacto ambiental en la zona de la ejecución del mismo; “se pretende es hacer un desarrollo armónico y compatible con la zona ronda del río Magdalena”.
Artesanos urgen reubicación
Mientras las obras en El Malecón del río Magdalena se encuentran suspendidas hace más de un mes, artesanos y comerciantes del sector reclaman un espacio de reubicación para trabajar pues se encuentran a la deriva desde mayo.
Sandra Milena Núñez, presidenta de la Asociación de Artesanos del Malecón de Neiva, aseguró que “las personas que salieron de El Malecón están pasando por una crisis económica porque la mayoría subsistían de las ventas diarias en el lugar. Estamos hablando de 70 personas entre artesanos y comerciantes, sin contar familias”, lamentó.
La vocera dijo además que las personas que laboraban en este importante sector de la ciudad decidieron ceder el espacio para que las obras dieran inicio, porque en una reunión de socialización del proyecto en mayo el alcalde Gorky Muñoz se comprometió a reubicarlos en un mes, “pero ese compromiso no se cumplió”.
Por lo anterior, desde la Asociación de Artesanos del Malecón de Neiva elevaron una carta al alcalde, solicitándole el espacio de reubicación que se había acordado. “Hace 20 días me respondieron mediante un oficio desde la Secretaría de Tic y Competitividad, donde me decían que estaban adaptando un lugar con módulos en la zona aledaña al Centro de Convenciones, en el separador de la Carrera 5 entre calles 21 y 24 y, que el 26 de septiembre se haría la subasta de los módulos, pero eso nunca pasó”, expresó la líder.
“Nosotros entregamos el espacio aceptando la promesa que nos reubicarían en un mes, pero llevamos seis meses esperando, además, se supone que las obras deberían estar avanzando, pero no es así”, complementó.
Respecto a la situación de los artesanos y comerciantes de esta estratégica zona de la ciudad, el personero Kleiver Oviedo Farfán, indicó, que desde el Ministerio Público ya se enviaron unas actas a la Administración Municipal solicitando que se cumplan los compromisos pactados, “relacionados a que ellos iban a buscar un espacio temporal para darles la posibilidad a estas personas de que pudieran trabajar”.
Detalles de la obra
El Malecón del río Magdalena, en Neiva, es una de las obras más esperadas por la comunidad.
Toda la ejecución del proyecto tendrá una inversión estimada de $6.746 millones, con recursos en partes iguales de la Gobernación del Huila y la Alcaldía de Neiva, en un área de más de 14.000 metros cuadrados.
El proyecto fue presentado el 27 de diciembre de 2019 a la ciudad por los entonces, alcalde Rodrigo Lara Sánchez y gobernador del Huila, Carlos Julio González Villa, quienes anunciaron, para ese momento, que las obras de recuperación del Malecón del río Magdalena habían quedado contratadas y empezarían a ejecutarse en enero de este año, con una duración de 8 meses.
La obra, que se encuentra suspendida, está a cargo del Consorcio Malecón Neiva con su representante legal el ingeniero Claudio César Mejía. El contrato de interventoría del proyecto lo lidera RYM constructores Interventoría cuyo representante legal es César Eduardo Gómez por un valor de $524 millones.
Cabe resaltar que el nuevo diseño buscará que el río sea el protagonista por tal razón se realizarán una serie de corredores para que los locales cambien de sentido y den una nueva visión al Magdalena; además serán mucho más grandes.
El proyecto del nuevo Malecón del río Magdalena es una de las obras más esperadas por la comunidad, ya que busca rescatar el turismo en la ciudad. La obra contará con una cubierta bioclimática, andenes, alameda, arborización, ciclorruta y alumbrado público en luces ‘led’ para disfrutar y compartir en familia. También tendrá locales para la plazoleta de comidas y un aula ambiental; además, contará con un centro artesanal y una cancha sintética.
Este proyecto busca poner la mirada de todos en pro de la preservación del río, pero, además, contribuirá en el fortalecimiento del turismo y desarrollo urbanístico de la capital del Huila.