La JEP fijó para el 20 de septiembre la audiencia en la cual la senadora del Pacto Histórico, Piedad Córdoba deberá entregar información sobre el magnicidio del líder conservador Álvaro Gómez Hurtado, ocurrido en 1995.
Sin embargo, esta no es no es la primera vez que la JEP intentará interrogar a Córdoba. Ya es la quinta vez, pues en las ocasiones anteriores estas diligencias tuvieron que ser suspendidas. La senadora argumentó que por sus condiciones de salud no podía entregar su testimonio, esto hizo que incluso la JEP ordenara la inspección de su historia clínica.
Córdoba fue citada después de que la extinta guerrilla de las Farc se adjudicara el crimen de Gómez Hurtado. La senadora aseguró que ella tiene información según la cual el crimen sí fue cometido por la antigua guerrilla, versión que no cree la familia del líder conservador.
Tras escuchar el testimonio de Córdoba y de algunos miembros de la antigua guerrilla, la JEP determinará si asume o no la competencia en el caso para que la investigación continúe en la justicia transicional.
Esta diligencia fue programada después de que los familiares de Álvaro Gómez solicitaran una versión en la que pudieran hacer preguntas sobre la información aportada por la senadora, pues ella ya rindió su testimonio en este caso, pero en esa ocasión por problemas técnicos, los familiares de Gómez no pudieron conectarse para interrogarla.