Un extenso drama que no parece tener fin, vive una familia del municipio de Santa María, Huila, que primero tuvo que enfrentar el duelo de la pérdida de un ser querido y que ahora tras haber pasado un mes no han podido darle su cristiana sepultura.
Todo este absurdo dolor ha surgido a raíz de un error en la transcripción del nombre del paciente aparentemente cuando fue ingresado al centro asistencial.
Todo se remonta al pasado mes de julio, cuando el departamento celebraba las festividades de San Juan y San Pedro. El municipio samario no fue ajeno al festival, pues en el transcurso de esta resultó herido con arma blanca un hombre que respondía al nombre de Carlos Javier Leiva.
En su momento el afectado fue llevado al hospital de la localidad para que recibiera atención médica. Por razones que están por esclarecerse, fue digitado mal su nombre, debido a que no portaba su documento de identidad.
Al parecer, allí quedó ingresado en el sistema con el nombre de su primo, Jaiver, cuando en realidad se llamaba Javier Leiva. Desde la E.S.E Nuestra Señora del Carmen de Santa María, el paciente fue remitido a la capital del Huila, debido a su delicado estado de salud.
Pese a que se encontraba bajo el cuidado de los especialistas sufrió una recaída y falleció el 4 de julio. Desde ese momento se llevó a cabo los actos urgentes por parte de la Policía Judicial y su cuerpo fue conducido al Instituto de Medicina Legal.
Debido a la confusión en su nombre, el cuerpo no ha sido entregado para que se lleven a cabo sus honras fúnebres. Ya han pasado 34 días, y Medicina Legal, le ha manifestado a su familia que deben esperar a que salgan los resultados de la prueba de ADN. Este hecho tiene consternados a sus seres queridos que buscan darle una pronta y digna despedida.