El presidente Juan Manuel Santos y la dirigencia nacional cafetera estarán en Pitalito inaugurando la trilladora de café y poniendo en marcha la Escuela Nacional del Café en el marco del Acuerdo de Prosperidad, enfocado en el tema cafetero como una especie de reconocimiento oficial y estatal al primer lugar de producción cafetera nacional tanto del Huila como del mismo Valle de Laboyos. El presidente Juan Manuel Santos y la dirigencia nacional cafetera estarán en Pitalito inaugurando la trilladora de café y poniendo en marcha la Escuela Nacional del Café en el marco del Acuerdo de Prosperidad, enfocado en el tema cafetero como una especie de reconocimiento oficial y estatal al primer lugar de producción cafetera nacional tanto del Huila como del mismo Valle de Laboyos. Como lo ha advertido la misma Casa de Nariño, la efectividad y resultados de los Acuerdos para la Prosperidad dependen del mismo Acuerdo y de lo que la dirigencia regional sepa solicitar. En este asunto es clave, sumamente esencial, que tanto el Municipio como el Departamento y el grupo de congresistas unifiquen criterios, diseñen las peticiones y no se improvise ni se presenten como ruedas sueltas. Las necesidades regionales no requieren mayores análisis ni estudios; sabemos exactamente a qué apuntarle y en dónde hay probabilidad de que el Gobierno Nacional pueda prestar su apoyo o tomar decisiones de fondo. No valdrá, entonces, desgastarse en temas ya resueltos o cuya probabilidad de hacerse realidad estén lejos en el tiempo, en los planes o en los recursos. Sin que se descarte que determinado dirigente social, gremial o político deje constancia de determinada molestia o inquietud de la región, lo importante es enfocarse en los asuntos de fondo. Salvo mejor opinión, en primer lugar estarán los temas cafeteros, pues son el motivo del Acuerdo; de ahí en adelante vale plantear la crisis del Occidente del Huila por los daños del Puente Paso del Colegio y la grave situación de la vía Neiva – San Agustín, la suprema vigilancia nacional sobre las compensaciones de El Quimbo, la seguridad regional – sobre todo la urbana en Neiva y Pitalito – la zancadilla que el Gobierno Nacional terminó haciendo sobre el texto final de la reforma a las regalías y el estado del mega proyecto del Distrito de Riego Tesalia – Paicol. Y de sobremesa el aporte concreto, en obras, de Santos y su equipo a la conmemoración de los 400 años de Neiva. Y alguien podría reclamar, en el más respetuoso pero enérgico tono al señor Presidente, la ausencia absoluta del Huila en la estructura del alto Gobierno pese al enorme caudal electoral que se le aportó en las dos vueltas presidenciales. Será muy poco el valioso tiempo del Acuerdo como para desperdiciarlo en intrigas locales, en temas y peticiones de poco alcance e impacto o para que la vocería de algunos asuntos la lleven quienes sólo desean afán de protagonismo. Por ello debe tenerse mucho cuidado en la selección de los voceros de las mesas. A aprovechar pues la ocasión. “Las necesidades regionales no requieren mayores análisis ni estudios; sabemos exactamente a qué apuntarle y en dónde hay probabilidad de que el Gobierno Nacional pueda prestar su apoyo o tomar decisiones de fondo”. Editorialito Dos conductores muertos y varios vehículos que transportaba crudo resultaron impactados en un nuevo ataque perpetrado por las Farc entre San Vicente y Paujil. Los controles en la vía anunciado por el Ministro de Defensa no funcionaron. Es necesario ejercer de verdad los controles permanentes en la zona, no esporádicos.