Putin regresa al Kremlin

El hombre fuerte de Rusia, Vladimir Putin, ganó la elección presidencial al obtener el 63,9% de los votos, según resultados casi definitivos. MOSCU, AFP El hombre fuerte de Rusia, Vladimir Putin, ganó la elección presidencial al obtener el 63,9% de los votos, según resultados casi definitivos. Tras el recuento de las papeletas en el 98,47% de los colegios electorales, Putin reunía el 63,9% de los votos, según datos anunciados por la comisión electoral central. El comunista Guenadi Ziuganov llega en segunda posición con el 17,04% de los votos. En tercer lugar, el multimillonario Mijail Projorov (7,09%) adelantó al populista Vladimir Jirinovski (6,31%) y superaba también al centrista Serguei Mironov (3,74%). La participación fue de 64%. Según la agencia Interfax, el récord lo batió de nuevo la república caucásica de Chechenia, donde Putin tuvo el 99,73% de los votos, con una participación del 99,59% de los electores. “Hemos ganado en una batalla abierta y honesta”, declaró Putin, con lágrimas en los ojos, según imágenes difundidas en directo por la televisión rusa, ante más de 110.000 seguidores que se concentraron cerca de la plaza Roja para festejar la victoria. “Nuestros electores saben diferenciar entre el deseo de renovación y las provocaciones políticas cuyo objetivo es destruir nuestro Estado y usurpar el poder”, añadió en clara referencia al movimiento de contestación sin precedentes contra su régimen activo desde hace tres meses. Tras ejercer como presidente entre 2000 y 2008 y primer ministro en los últimos cuatro años, Vladimir Putin regresa al Kremlin para desempeñar un tercer mandato aumentado a seis años por una reforma constitucional. En 2018 podrá volver a presentarse. El presidente saliente, Dimitri Medvedev, renunció a su reelección para permitir el regreso de su mentor al Kremlin, y estimó que “el país y cada uno de nosotros necesitábamos esta victoria”. “¡No dejaremos que nos arrebaten nuestra victoria!”, exclamó Medvedev. Por su lado, el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, saludó el triunfo de Putin, deseándole “el mayor de los éxitos” y reiterando la intención de profundizar los lazos bilaterales. — La oposición denuncia fraudes — La oposición, que convocó una gran manifestación para el lunes por la noche en la capital rusa, denunció unas elecciones “fraudulentas” e “ilegítimas”. El candidato comunista, Guenadi Ziuganov, estimó que la elección fue “un robo, absolutamente deshonesta e indigna”. “No reconocemos estas elecciones”, agregó. Para Vladimir Rijkov, uno de los organizadores de las manifestaciones opositoras de diciembre, “estas elecciones no se pueden considerar legítimas”. “Mañana por la mañana habremos contabilizado 20.000, 30.000 casos de fraude”, dijo en la televisión estatal. Mijail Projorov no quiso pronunciarse sobre la limpieza de los comicios, mientras que Jirinovski y Mironov reconocieron la victoria de Putin. Según la agencia Interfax, el vencedor de las elecciones telefoneó a Projorov, lo felicitó y le deseó “éxito” en su proyecto de crear un partido liberal. Antes incluso del cierre de las urnas, representantes de algunos candidatos, opositores, la organización de observación electoral Golos y la Liga de Electores, así como medios independientes señalaron numerosos fraudes. La página web control2012.ru, que registra las infracciones observadas por la Liga de los Electores, el partido Iabloko y los partidarios de Projorov habían contado por la noche 5.758 irregularidades, incluidos 327 casos de “transporte masivo de electores” para que votaran en grupo y 131 casos de urnas con votos falsos. Un periodista de la AFP vio en la plaza Bolotnaya de Moscú a más de un centenar de autobuses que llevaron a la capital a miles de jóvenes procedentes de otras regiones, quienes reconocieron que votarían por Putin. El poder había asegurado que los comicios serían libres y democráticos, después de que los fraudes denunciados en las legislativas de diciembre desencadenaran una oleada de protestas sin precedentes desde 2000. Las autoridades indicaron que las elecciones se desarrollaron sin incidentes graves, exceptuando un ataque contra un colegio electoral en la región caucásica de Daguestán, en el que murieron tres policías.