Todo el peso de la ley deberá recaer sobre el hombre que aparentemente ebrio arrolló y mató a un ciclista y dejó a otro gravemente herido, en hechos ocurridos el pasado puente festivo en la avenida Circunvalación de Neiva.
Juan Carlos García Sastoque, empresario y socio de un almacén de venta de bicicletas, fue la víctima fatal de este siniestro protagonizado por un individuo a bordo de un vehículo de alta gama, marca Ford Mustang, de placa GLR 226.
Como es de conocimiento público, la tragedia se registró en la madrugada del domingo 3 de noviembre pasado a la altura de la carrera 7W con calle 25E, cuando el señor García Sastoque en compañía de su hermano, César Augusto, salió a practicar ciclismo. Tristemente, fueron embestidos violentamente por el Mustang rojo, el cual terminó colisionando con un vehículo de carga pesada.
“Se sabe que este vehículo Ford Mustang era conducido por una persona acompañada de tres más. Lamentablemente, fueron recogidos por otro vehículo, un Nissan color gris, y se retiraron del lugar de los hechos. Esto representa un agravante: la omisión de socorro a las víctimas del siniestro”, fue el reporte que entregó la secretaria de Movilidad, Edna Johana Cruz, al referirse a los hechos.
Como era de esperarse, este hecho ha generado una profunda indignación en la sociedad neivana. La ‘herida’ se ha abierto mucho más al conocerse que el protagonista habría sido Sergio Israel Rojas Serrano, un funcionario de la Superintendencia de Transporte que en el pasado escenificó un hecho similar en las calles de Neiva. Además, el vehículo de su propiedad a la hora del accidente del domingo pasado no contaba con SOAT vigente.
Por tratarse de un servidor público, Sergio Israel Rojas Serrano debe responder disciplinariamente por estos hechos. Y, obviamente, debe enfrentar la justicia desde el plano penal, en donde no puede haber ningún tipo de concesiones.
Las autoridades tienen la obligación, por su parte, de arreciar con sus operativos y puestos de control para evitar que esta clase de personas manejen a sus anchas por las vías de Neiva y del Huila.