Con impotencia, dolor y frustración se encuentra doña Diana, junto a sus hijas de 14 y 19 años, quienes ven a las autoridades que no actúan con celeridad en el caso del señor William Rojas Yustres, quien perdió la vida cuando conducía su bicicleta en inmediaciones del barrio Rodrigo Lara de Neiva.
Un conductor indolente le segó la vida al señor William Rojas Yustres, el pasado domingo en la carrera 7W con calle 25E frente al barrio Rodrigo Lara de Neiva. Desde entonces, el responsable no ha sido llamado por la justicia para responder por lo sucedido, pese a que habría incurrido en un doble delito.
Iba hacer deporte
La tragedia tuvo lugar luego de que el ciudadano de 52 años, saliera a eso de las 5:45 de la mañana de su vivienda, para reunirse con un grupo de amigos con los que habitualmente salía los domingos a montar bicicleta.
Desafortunadamente “una persona irresponsable, lo atropelló, no le prestó auxilio y lo dejó tirado en la vía”, indicó doña Diana.
Su esposa además mencionó que se enteró porque uno de los compañeros que lo estaba esperando, lo llamó y no le contestó, entonces se devolvió a buscarlo encontrándose con la triste escena del accidente.
Fue así como de inmediato se dirigió hasta la casa donde vivián, para ponerla al tanto de lo ocurrido. “Me llevaron hasta el sitio donde estaba tirado muerto en un lago de sangre, fue un momento muy doloroso”, añadió.
Se fugó el conductor
Lo más indignante fue enterarse que la persona que lo arrolló había huido del lugar sin ni siquiera haberle prestado ayuda. Gracias al apoyo de taxistas y vecinos del sector que se solidarizaron, se logró determinar que el vehículo involucrado era uno de la marca Chevrolet línea Onix color negro, de placa LUR-109, en el cual su conductor se dio a la fuga.
En el trabajo de inteligencia marcaron la ruta que tomó el automóvil, hallándolo con una abolladura en la parte izquierda del parabrisas en el conjunto residencial Entre Ríos, ubicado en la Avenida Inés de García Durán en el sur de Neiva.
“No solo acabó con la vida de él, sino la de nosotros también, ya han transcurrido como cuatro días y no ha pasado nada. Eso me llena de desconsuelo, de incertidumbre, me revictimiza porque veo esas fotos en las redes sociales y junto a mis hijas sentimos ese dolor inmenso que no se imaginan, estamos de pie por misericordia de Dios”, dijo Diana.
Aunque se mencionó que el conductor ocasionó el siniestro justo cuando salía de un concierto al que había asistido la noche anterior, la Secretaría de Movilidad, no pudo constatar mediante una prueba de alcoholemia si esta persona venía en estado de embriaguez, porque se ocultó en su casa.
Se sintió descubierto
Al verse descubierto, el sujeto que maniobró el vehículo acudió de manera voluntaria a la Secretaría de Movilidad para presentarse, sin embargo, no ha tenido ningún acercamiento con la familia de William.
“Esa persona se presentó el día lunes y se realizaron todas las actuaciones que quedaron a disposición de la Fiscalía General de la Nación”, aseveró un vocero de la Secretaría de Movilidad.
Doble delito
El abogado Cesar Ramírez, quién está asesorando a la familia anotó, “lo que sabemos hasta el momento en la visita que realicé a la Fiscalía 19 Seccional de Neiva, es que ya tienen lista toda la documentación para llevar a cabo la imputación. No tenemos el nombre del conductor, por lo que alcancé a escuchar, se trataría de una persona joven de la comunidad afro, estamos a la espera de que la Fiscalía, obre con celeridad frente a este caso”.
Además, se supo que el vehículo involucrado es nuevo y está a nombre de una mujer. Según el abogado del caso, se podría considerar la configuración de un doble delito.
“Se puede considerar un homicidio culposo agravado por haberse volado del sitio de los hechos y no prestar auxilio a la víctima y otro delito que se debe estructurar también, es la destrucción u ocultamiento de la prueba porque el carro lo entregaron a la aseguradora y se lo llevaron al taller, por lo que hicieron un ocultamiento y destrucción del elemento material probatorio del juicio”, explicó Ramírez.
Claman justicia
La familia de la víctima mortal clama que se haga justicia, que no archiven los documentos y quede como si nada, “solo pedimos eso, esa persona ni siquiera se ha manifestado. En mi casa estamos a toda hora tristes, mis hijas lloran dicen que se sienten frustradas, con rabia e impotencia, quiero que sea un mal sueño, pero ya sé que él no está y me toca continuar adelante con mis hijas y no sé qué vamos a hacer”, pronunció Diana.
Don William era un hombre que trabajaba para el servicio de vigilancia de la empresa Postobón en Neiva. Era el pilar de su familia. “Se va un padre, un hombre amoroso y que era todo para nosotras, para su mamá, su hermana, no solo acabó con la vida de él, sino con la de todas nosotras. Necesito que me apoyen, que me ayuden que esto no quede impune”, concluyó.