Potencias piden a Irán un “diálogo serio” sobre programa nuclear. Benjamin Netanyahu reiteró que Israel no puede aceptar un Irán dotado con armas nucleares. Potencias piden a Irán un “diálogo serio” sobre programa nuclear. Benjamin Netanyahu reiteró que Israel no puede aceptar un Irán dotado con armas nucleares. Al enriquecer uranio a 20%, Irán se acerca de la tecnología que le permite ir hasta el 90%, el nivel de pureza necesario para fabricar una bomba atómica. VIENA (AFP) Las grandes potencias llamaron a Irán a “iniciar un diálogo serio” y “sin condiciones previas” sobre su controvertido programa nuclear, según una declaración presentada al consejo de gobierno de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (Aiea). “Llamamos a Irán a que se comprometa, sin condición previa, con un proceso de diálogo serio” para disipar las dudas sobre la naturaleza de su programa nuclear, escribieron los países del grupo del 5+1 (Estados Unidos, China, Rusia, Gran Bretaña, Francia y Alemania). El consejo de gobernadores de la Aiea inició en Viena una reunión de una semana a puerta cerrada para buscar una salida al polémico programa nuclear de Irán. Las grandes potencias exhortan en particular a Irán a “cumplir su promesa, garantizando el acceso a Parchin”, en referencia al complejo militar situado próximo a Teherán. El jefe de la agencia nuclear de la ONU, Yukiya Amano, dijo que hay “actividades” en marcha en la planta militar iraní de Parchin y que sus expertos esperan poder visitarla cuanto antes. “Tenemos indicaciones de que hay actividades en marcha” en la planta de Parchin, donde la agencia sospecha la presencia de un contenedor susceptible de probar modelos de explosión aplicables a armas atómicas, dijo Amano en una conferencia de prensa. Estas actividades “nos hacen pensar que sería preferible ir más pronto que tarde”, dijo. En febrero, las autoridades iraníes rechazaron el acceso a un equipo de inspectores de la agencia de la ONU a la planta de Parchin, lo que contribuyó al fracaso de la misión de la Aiea en Teherán. Irán dijo de su lado que estaba dispuesto, bajo condiciones, a reabrir las puertas de Parchin a los inspectores de la agencia, quienes visitaron ese lugar ya dos veces en 2005. La jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, había propuesto a Irán, en nombre del grupo de los 5+1, reanudar las discusiones sobre su programa nuclear, sin precisar la fecha o el lugar para llevar a cabo esas negociaciones. Las conversaciones están congeladas desde hace más de un año. En una carta al negociador iraní Said Jalili, Ashton había subrayado que no quería volver a vivir “la experiencia de Estambul”, donde el último encuentro tuvo lugar a comienzos de 2011 y resultó un fiasco por las condiciones planteadas por Irán. Irán advirtió que las nuevas conversaciones fracasarían si las grandes potencias ejercen presiones sobre Teherán. “No cederemos sobre las sanciones y las otras medidas para aislar y presionar a Irán. Juzgaremos a ese país por sus actos”, replicó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney. Tras dos misiones de la agencia en Irán, consideradas decepcionantes por la AIEA, las grandes potencias dicen estar “preocupadas por el hecho de que, pese a los esfuerzos realizados hasta ahora, no se ha llegado a ningún acuerdo” sobre las modalidades de verificación, por parte de la agencia, de los puntos señalados en el informe sumamente crítico del pasado noviembre. La Aiea había señalado en ese informe la dimensión militar del programa nuclear iraní, basándose en elementos presentados como creíbles. Desde noviembre, la presión sobre Irán se ha intensificado. Estados Unidos y la Unión Europea han reforzado sus sanciones. Israel agita la amenaza de un ataque militar.