La decisión del Tribunal Administrativo del Huila de suspender provisionalmente al alcalde de Rivera, Luis Humberto Alvarado Guzmán, ha generado una abrumante incertidumbre. A pesar de que el Gobernador del Huila nombró como alcalde encargado a Luis Felipe Obando Parra, parece que la sensación de ingobernabilidad por la ausencia del titular del cargo es cada vez más profunda. Así lo deja saber el Consejo Territorial de Planeación del municipio, en una carta que le allegó al órgano de la Rama Judicial.
Johan Eduardo Rojas López
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La suspensión del mandatario de los riverenses, Luis Humberto Alvarado Guzmán, desde un inicio causó preocupación entre los ciudadanos por el ‘limbo’ político al que se enfrentaba esa municipalidad. Pese a que el gobernador del Huila, Rodrigo Villalba Mosquera, nombró como alcalde encargado al abogado especialista en derecho procesal Luis Felipe Obando Parra, la incertidumbre no ha cesado.
Hoy, luego de casi seis meses, mediante una carta que el Consejo Territorial de Planeación del Municipio de Rivera, le allegó al Tribunal Administrativo del Huila, se dio a conocer la preocupación “por la gobernanza y gobernabilidad”, que se percibe en el municipio desde el pasado mes de marzo de 2024. Esto debido a la admisión de una demanda de nulidad electoral que se adelanta contra el dirigente liberal y que hasta ahora ha dado como resultado la suspensión provisional de Alvarado Guzmán.
En letargo
Esta decisión de los magistrados ha impedido que el mandatario electo en cuestión haya podido ejercer sus funciones como primera autoridad de la municipalidad y, por tanto, solicitan que su situación jurídica sea resuelta prontamente. Lo anterior, por consiguiente, ha generado un letargo en cuanto a obras e inversiones.
“Manifestamos nuestra preocupación, porque estamos en el séptimo mes de gobierno, y se evidencia poca ejecución, perjudicando de esta manera el desarrollo de proyectos para el municipio y el bienestar de la ciudadanía. Solicitamos su pronunciamiento para resolver la inestabilidad que se viene presentando en nuestro municipio”, se lee en la carta.
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¿En qué no se han logrado articular?
Luis Enrique Peña Puentes, personero de Rivera, en diálogo con LA NACIÓN, sostuvo que, el municipio no es que este en sí decaído, sin embargo, no se ha logrado articular de manera eficaz en temas de administración, pero en el resto de los aspectos está bajo “su normalidad”.
Corroboró que el Plan de Desarrollo está aprobado y dejó claro que las obras e inversiones se están manejando con “cautela”.
“Aquí hay un perjudicado y es el pueblo”
Por su parte, uno de los contrincantes de Alvarado Guzmán, el excandidato a la Alcaldía por el Partido Conservador, Nelson Enrique Castro Perdomo, se refirió a la situación y expresó que la realidad es que sí hay un perjudicado y es el pueblo. De allí que, esperan que el Tribunal Administrativo del Huila en primera instancia y el Consejo de Estado en segunda, se pronuncien “por el bien de Rivera”.
“Digamos que ya uno con la experiencia sabe que es normal que los Planes de Desarrollo empiecen a ejecutarse después de mitad de año prácticamente. Entonces, yo diría que es muy prematuro para decir si está en pausa o estancado”, comentó Castro Perdomo, quien agregó que, al mandatario encargado no se le podría evaluar su desempeño porque apenas entrará a ‘pilotear’ el Plan de Desarrollo.
Expuso además que la incertidumbre es para “lo que viene” porque de aquí en adelante sí se debe empezar a ver la ejecución de los proyectos que quedaron estipulados dentro del documento que fue aprobado en la corporación edilicia.
“Se genera una sensación de ingobernabilidad que es discutible”
Según el concejal Andrés Alfonso Calderón Bohórquez, esta es una realidad que no debería presentarse porque para eso hay alcalde encargado. Reconoció, entonces, que lo primordial es definir la condición legal de Alvarado Guzmán porque esa incertidumbre genera inestabilidad política que se refleja en el crecimiento de la región.
“Se han presentado algunas dificultades porque no es lo mismo que al frente del municipio este quien eligió la gente, a que esté un extraño por llamarlo de alguna manera. No es el mismo nivel de incidencia. Hay oposición que está todo el tiempo tratando de tergiversar información, generando desesperanza, diciéndole a la gente que ya no vuelve el Alcalde, que habrá nuevas elecciones; ósea, eso genera una cantidad de cosas y elementos que juegan de manera colectiva con el municipio. Se genera una sensación de ingobernabilidad que es discutible, que pues para unos es una realidad y para otros no. Eso de todas maneras afecta”, puntualizó el cabildante.
Aclaró, igualmente, que el Plan de Desarrolló se aprobó ya estando suspendido Alvarado Guzmán, es decir, el visto bueno por parte del Concejo Municipal se dio en mayo, mientras que el órgano de la Rama Judicial declaró que la medida cautelar quedaba en firme en febrero, decisión que confirmó en abril luego de que la solicitud de aclaración, elevada por su apoderado, no prosperara. Sin embargo, esta ruta de navegación fue construida bajo sus lineamientos y, por ende, va en coherencia con su propuesta de gobierno.
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Una elección entre demandas
Es importante recordar que la elección de Luis Humberto Alvarado Guzmán como alcalde del municipio de Rivera, fue demandada por Jhon Faiver Arce Trujillo, quien solicitó que se declarara la nulidad y se cancelara la credencial que la Comisión Escrutadora Municipal de Rivera le otorgó como alcalde.
El demandante interpuso esta acción contra la elección de Alvarado Guzmán por tratarse del hijo de Nidia Guzmán Durán, rectora de la Universidad Surcolombiana -Usco-. Según la demanda este panorama configura nepotismo, el uso de autoridad y poder, para favorecer intereses de dicha candidatura, con lo cual se generó un desbalance justo en la contienda electoral.
Los magistrados del Tribunal Administrativo del Huila, Enrique Dussán Cabrera, Jorge Alirio Cortés Soto y Ramiro Aponte Pino, manifestaron que luego de analizar las pruebas aportadas por el demandante, se advierte que Nidia Guzmán cumple funciones de autoridad administrativa en el departamento del Huila y, por ello, decretaron la suspensión provisional del acto de elección.
Todo esto luego de haber afrontado con anterioridad otras tres demandas por separado que también pedían la nulidad, interpuestas por Luis Carlos Puentes Puentes, Efraín Puentes Fernández y Víctor Hugo Escandón.
Empero, como una aparente estrategia para dilatar la ejecución inmediata de la medida cautelar, el abogado, Hollman Ibáñez Parra, apoderado del alcalde Alvarado Guzmán, solicitó la aclaración del auto que decretó la medida cautelar. Entre otros argumentos adujo que el auto contiene una imprecisión y ambigüedad, en lo concerniente al concepto y alcance del elemento objetivo y territorial para la configuración de la inhabilidad.
En su criterio, el concepto del elemento territorial o espacial no se encuentra claro en la medida que, utiliza el tiempo gramatical infinitivo, al indicar: “debe poder ejercerse en dicha municipalidad”, con lo cual no resulta afirmativo que, en efecto, dicho elemento se haya configurado en los supuestos fácticos establecidos por el demandante en la solicitud de la medida cautelar.
Por su parte los magistrados desestimaron la argumentación y en tal virtud, los tres magistrados negaron la solicitud de aclaración del auto que decretó la medida cautelar de suspensión y ordenó la continuación del proceso.