Como un milagro han catalogado los fieles católicos del municipio de Albania el hecho de que a una habitante de este municipio del sur del Caquetá, al parecer, se le haya aparecido la imagen de la Virgen de Aránzazu en una veladora.
Según se conoció, la revelación de la figura religiosa ocurrió en la casa de Vilma Sánchez, una mujer de 71 años de edad, devota de la Virgen María. Hasta el sitio de la aparición, en el barrio Turbay, llegaron decenas de fieles y curiosos para apreciar lo que esta mujer había dado a conocer.
Muchos lugareños manifestaron que sí se trata de un milagro, porque en altar donde ella acostumbra a rezar el rosario prendió la veladora y cuando se disponía a orar ella vio como la veladora tenía un ramillete de uvas en el pabilo, la mujer aún no comprendía de qué se trataba por lo que llevó la vela para sacarle unas fotos, y en una de ellas claramente se vio que después del pabilo se ve la Virgen.
Esta fiel mujer quien sirve en la iglesia desde hace 30 años, visita a los enfermos y reza el rosario todos los días en su humilde hogar, hoy asegura estar bendecida al tener la aparición de la virgen en su casa.
Ante este sagrado momento la mujer decidió no volver a encender la veladora para conservarla y recordar el resto de su vida este grato momento, del cual muchos de sus vecinos y pobladores de Albania fueron testigos. “Los vecinos me dicen que hay que compartirlo porque esto es algo maravilloso. Yo ni siquiera le había contado al sacerdote, y él solo me dijo que viviera el momento”.
Los creyentes solo pudieron explicar lo sucedido como un milagro por las bondades que doña Vilma tiene como ser humano; ella, según los vecinos, tiene un gran corazón, es carismática y ayuda al prójimo, razón por la cual la Virgen se apareció en su hogar para llenarlo de bendiciones.
Ante los ojos de muchos esto podría ser una coincidencia pero ante los ojos de Vilma, su fe es lo que hizo que la Virgen se apareciera ante su mirada.