La Nación
JUDICIAL

‘Se mató antes de casarse’

José Helider Rodríguez Lozada fue encontrado sin vida en una plantación de cacao. El campesino dejó una extensa carta a su compañera sentimental despidiéndose. José Helider Rodríguez Lozada fue encontrado sin vida en una plantación de cacao. El campesino dejó una extensa carta a su compañera sentimental despidiéndose. LA NACIÓN, NEIVA Sin vida en un cultivo de cacao fue encontrado el campesino José Helider Rodríguez Lozada. En una carta dirigida a su compañera sentimental, expresó que los problemas con la familia lo llevaron a quitarse la vida, en zona rural de Neiva. El hallazgo ocurrió hacia las 9:00 a.m. de ayer, en el sector de la quebrada El Limón en la vereda El Triunfo, ubicada en el corregimiento de El Caguán, en el sur de la capital huilense. Rodríguez Lozada, de 37 años de edad, de su puño y letra consignó en seis hojas de un cuaderno de rayas, el amor que sentía por su compañera sentimental, Gina Mayorly Ramos, con quien contraería matrimonio el próximo sábado, “quiero que sepas que todo el tiempo que estuvimos los dos jamás te traicioné, siempre fui para ti…”. En la extensa misiva, el labriego expresó que tomó la fatal decisión por los problemas que sostenía con su familia, “…no pude más con tantos problemas con mi familia… jamás se cansarán de hacerme la vida de cuadros…”. El labriego pidió perdón a Ramos por dejarla sola, “perdóname mi vida, pero a veces pienso que era la única forma de que mi familia deje en paz a usted y a mis hijos…”. La mujer manifestó que los inconvenientes del labriego con la familia comenzaron cuando el hombre le compró al papá un terreno en Cerro Neiva, que después arrendó a una empresa de telefonía celular para la instalación de una antena, por lo que recibía 10 millones de pesos mensuales. “Compró esa tierra al papá y la plata que le daba la empresa la seguía reclamando el papá, ya cuando Helider se separó de la mujer que tenía antes y nos salimos a vivir juntos, él empezó a reclamar esa plata y desde ese momento empezaron las peleas con la familia… le pusieron cualquier cantidad de demandas…”, dijo Gina Mayorly. A los problemas familiares se sumó su captura en diciembre de 2011 por parte del Ejército, que lo señaló del delito de tráfico y porte de explosivos al encontrar seis granadas en el potrero de la casa. El hombre fue enviado a la cárcel como medida de aseguramiento y recobró la libertad el pasado 6 de enero de 2012, cuando su abogado solicitó la revocatoria de la misma y fue concedida por el juez penal.