La Nación
Se puede acabar la guerra: Embajador de Noruega 1 23 octubre, 2024
ACTUALIDAD

Se puede acabar la guerra: Embajador de Noruega

Se puede acabar la guerra: Embajador de Noruega 7 23 octubre, 2024
Lars Vaagen, embajador de Noruega, luego de su visita al Caquetá.

Lars Vaagen llegó hace muy poco tiempo a la Embajada de Noruega en Colombia, pero su propósito es conocer todo el país lo más pronto posible. El diplomático recorrió el departamento del Caquetá conociendo las experiencias que apoya el fondo de colaboración de su país. Lars Vaagen dialogó con LA NACIÓN de la paz, la guerra, el posconflicto, las labores de la sociedad civil y los proyectos de colaboración de la comunidad internacional.

¿Cuáles son las expectativas de Noruega frente al proceso de paz que adelanta el Gobierno colombiano y las guerrillas de las Farc?
Noruega se siente muy honrada por la invitación de garante que nos hizo el presidente Santos, porque como país tenemos un rol muy especial en el proceso de paz que se realiza en La Habana. Somos facilitadores del proceso, y como los campesinos de El Pato, estamos haciendo nuestro trabajo lo mejor que podemos.

¿Qué destaca de este proceso?
Estamos muy impresionados del coraje del presidente Santos de empezar el proceso de paz. Eso es muy importante. Estamos convencidos que vamos a lograr un resultado entre las dos partes, pero va a ser difícil. Sin embargo, con estas dificultades que todo proceso de paz tiene es muy impresionante el esfuerzo del presidente Santos y su equipo en las negociaciones.

¿Creen firmemente en el proceso de paz?
Creemos que el proceso de paz merece todo el apoyo y Noruega como facilitador se lo brinda a todo el equipo alrededor de la mesa. La comunidad internacional apoya fuertemente esta experiencia, porque se puede acabar la guerra. Todos estos conflictos dejan heridas que no se van a cerrar, pero vale la pena tratar de hablar y buscar una condición para llegar al acuerdo de paz.

¿Cuál debería ser el papel de la sociedad civil frente al proceso?
Hablar en mi país de la sociedad civil es fundamental, porque esto nos ha llevado a una posición muy privilegiada. Según las últimas estadísticas, Noruega es el país con más desarrollo humano y con menos diferencias y desigualdades sociales. Hemos desarrollado una sociedad muy fuerte y es algo que apreciamos, porque hay fuerzas que desafían un poco al Gobierno, porque tienen propuestas importantes en un ambiente constructivo.

Se ve la voluntad de empujar el desarrollo. La crítica y autocrítica es fundamental en una sociedad consciente que empuja a las sociedades. Por eso en nuestra política de desarrollo en otros países siempre la sociedad civil y las organizaciones no gubernamentales son importantes.

¿Cuál va a ser el papel de Noruega en un eventual posconflicto?
Veo muy probable la implementación de un acuerdo de paz en Colombia, pero luego vendrá el desafío de la implementación. No va a ser para nada fácil. Tenemos entonces la intención de participar en este proceso de implementación. Somos una embajada pequeña y pensamos desarrollar algunos proyectos bilaterales.

En Colombia no tenemos una tradición de colaboración, sino exclusivamente en la acción humanitaria a través de la ONG más grande que hay en Noruega: el Consejo de Refugiados, que trabaja en todo el mundo. Pero somos uno de los principales aportantes para todas las agencias de Naciones Unidas. La ONU es un canal que utilizamos mucho ahora. Por ejemplo con Acnur para los desplazados y con el Pnud para proyectos de desarrollo. Este es el camino que pensamos seguir.

¿Cuál fue el propósito de su vista al Caquetá?
Como nuevo Embajador, recientemente llegado, quiero conocer toda Colombia y aprovecho todas las oportunidades para hacerlo rápidamente. Conocer todas las regiones del país es una ventaja muy grande en mi labor como Embajador.

El propósito de la visita al Caquetá fue muy simple. Junto con Suecia tenemos un fondo y planificamos algunas visitas para ver los proyectos que hemos apoyado, los resultados y los desafíos. Visitamos dos proyectos que se ejecutan: uno en Florencia y otro en San Vicente del Caguán.

¿En qué están enfocados estos proyectos?
En Florencia se enfocó en la preservación de la Amazonía y de su bosque. En San Vicente del Caguán, en la zona de reserva campesina del Pato. La visita allá me dejó una muy buena impresión aunque es muy preocupante la presencia de violencia en la zona. Pero aparte de eso la visita fue muy tranquila.

¿Cómo le pareció El Pato?
Dormí muy bien allá. Mejor que nunca. Estuve en contacto con una naturaleza muy hermosa y el nivel de organización campesina que vi me pareció una historia muy particular. En esta zona a partir de los años 50 los habitantes aprendieron a dar prioridad a asuntos muy importantes para su sobrevivencia.

¿Cómo cuáles?
El mejoramiento de su agricultura en una zona muy marginal pero muy bella, con excelentes tierras. En El Pato viven campesinos que a pesar de su cercanía con las confrontaciones violentas tienen un enfoque muy fuerte en mejorar las condiciones de sus familias, su organización y su trabajo diario en el cultivo de productos agrícolas. Probé las lentejas y varios alimentos cosechados por los campesinos. Fue una muy linda experiencia.

¿Qué le dejó este viaje por el Caquetá?
Me preocupa la grave deforestación del Caquetá. En América ocupa el peor segundo lugar. Igual es la situación en San Vicente del Caguán. Por eso probablemente nuestro principal aporte económico en Colombia para los próximos años será un gran proyecto con Alemania y Gran Bretaña para frenar la deforestación y reforestar.

¿En qué consistirán?
Tendrán un poco de relación con el Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete (Guaviare), que ahora es mucho más grande, pero no es una excusa para no tener actividades en el resto del país. Por eso con la agencia alemana GYZ vamos a desarrollar un gran programa de proyectos para salvar el bosque caqueteño.

Para esto, la experiencia de la población de El Pato, a pesar de las dificultades, es muy importante porque tienen una enorme consciencia del cuidado del medio ambiente y de protección del bosque. Esto será muy importante en la actividad que realizará la Embajada de Noruega más adelante.

¿El medio ambiente y la paz?
Nuestro propósito es reducir los efectos negativos del cambio climático y esto lo podemos enlazar con el proceso de paz. Se trata de definir cómo se utilizará el territorio. El punto uno de la agenda de La Habana fue el desarrollo agrario integral y las condiciones de los habitantes del campo colombiano.