Difícil un mejor momento como el actual para realizar la V Cumbre del Petróleo, Gas y Energía, dada la coyuntura nacional y mundial de los hidrocarburos; en Colombia se está construyendo la política energética de cara al cambio climático, mientras que Europa se replantea su dependencia energética. Cubrimiento especial de LA NACIÓN en Bogotá.
CATERIN MANCHOLA
Durante la V Cumbre del Petróleo, Gas y Energía, el evento más importante del sector a desarrollarse en Ágora Bogotá, se hablará del futuro en Colombia y el mundo de esta industria que es fundamental en la economía del país, pero a su vez también se analizará el rol de la misma en el cambio climático.
De acuerdo con la Asociación Colombiana de Ingenieros (Aciem) y la Asociación Colombiana del Petróleo y Gas (ACP), la coyuntura que vive el sector energético, en particular el petrolero, es crucial pues se está ad portas del anuncio de una serie de políticas que impactarán el futuro de la exploración y ello tendrá efectos en todo el país.
Es así como durante tres días expertos analizarán el tema y le harán aportes sustanciales al Gobierno Nacional en el marco de la creación de esa política energética, que incluye la política de hidrocarburos.
La discusión cuenta con premisas del presidente Gustavo Petro como “cerrar la llave del petróleo y el gas” a mediano plazo, y que la “solución al cambio climático es un mundo sin petróleo y sin carbón”.
Mientras que, por el contrario, para Ismael E. Arenas, miembro de la junta directiva de Aciem, para hacerle frente al cambio climático Colombia no debe acabar con su oferta de combustibles fósiles, sino, a largo plazo, disminuir la demanda de estos mediante la transición energética en lo cual “el sector petrolero está comprometido”.
“Estamos convencidos de que esto se puede realizar y acelerar, pero la seguridad energética es uno de los pilares fundamentales que debe tener esa política, y más allá de eso también una seguridad fiscal del país, es decir, tiene que ver con los aportes que hace la industria a la economía”, subrayó.
Y es que la Cumbre coincide con la 27 Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2022, más comúnmente conocida como COP 27 donde se analiza precisamente el daño al medio ambiente que producen los combustibles fósiles (como el carbón, el petróleo y el gas) que, para los expertos de la ONU, “son con diferencia los mayores causantes del cambio climático global”, y en ese sentido se reitera la urgencia de implementar energías limpias.
Frente a esto Francisco Lloreda, director de la ACP indicó que la industria es “líder en el tema de desarrollo sostenible en Colombia” y que están comprometidos con lograr los objetivos trazados en ello.
Sin embargo, también trajo a colación que lo que ocurre en Europa: “nos plantea una serie de interrogantes sobre si estamos ante una nueva realidad energética y cómo es”. La crisis que vive el continente en materia de seguridad energética, debido a la guerra Rusia – Ucrania, ha obligado a que esté “reconfigurándose desde el punto de vista energético” y “es muy distinta a la de hace unos años”.
Para no repetir la historia de Europa, Lloreda enunció que debido a “las anomalías que se presentan en la temperatura del planeta que conocemos como cambio climático”, y al cómo no afectar la calidad de vida de los 8 mil millones de habitantes del planeta y a sus expectativas de desarrollo, se está analizando cómo lograr una transición energética integral, es decir, “tienen que ir acompasadas distintas transiciones: macroeconómicas, fiscal, de regalías y productiva con lo energético”. Ese es parte del planteamiento para Petro.