Es claro que esta generación está siendo reconocida por tener a los mayores emprendedores. Desde muy jóvenes, deciden no emplearse y lanzarse al ruedo invirtiendo en una empresa, ya sea de comida rápida o gourmet; de entretenimiento, de consumo masivo y en general, de todo lo que se les ocurra que pueda tener éxito.
Esta generación, tiene menos miedo al fracaso y se arman de valor para crear sus nuevos negocios. Tienen maratónicas jornadas de trabajo, pasan numerosas noches en vela y con mucho esfuerzo ponen en marcha sus proyectos. Es por eso que, en La Nación, queremos hacerles un reconocimiento a estos jóvenes, a esos que luchan por sus sueños, que no se conforman con nada, que nacieron competitivos, ingeniosos, astutos, inteligentes y arriesgados, a esos emprendedores que hoy aportan a la economía del país y que luchan para que todo sea cada vez mejor.
Daniela Casadiego y Sandra Carolina Hernández
El 15 de septiembre de 2016, nació el sueño de estas dos opitas, Shake It Out: una empresa dedicada a la elaboración de malteadas que pueden ser diseñadas por quien las va a disfrutar, cuentan con gran variedad de ingredientes, tamaños y colores, literalmente, son especialistas en llenar de sabor los días de sus clientes.
“Esta nueva estrategia, es quizás lo que ha generado tanto acogimiento de la marca pues tenemos productos importados, productos nacionales y a quienes les gusta el dulce, eso les encanta” pero también “contamos con una línea más refrescante hechos a base de frutas frescas”, afirma Sandra.
Las dos hacen parte del personal de trabajo, disfrutan de su empresa, de su trabajo y de la experiencia de ser emprendedoras, lo cual genera mayor compromiso y dedicación pues desde que empezaron, el amor, la entrega, la disciplina, la música y también la diversión, han sido los ingredientes principales para mover el negocio, y eso se ve reflejado hasta en el nombre.
“La música ha sido inspiración para este proyecto. ''Shake" significa malteada o batido y coincidentemente "Shake It Out" significa muévelo, una frase musicalmente conocida y que se ha convertido en un patrón de gran importancia para varias canciones. Shake It Out es símbolo de dinamismo, movimiento que se ve reflejado en el modelo de negocio que manejamos, donde cada cliente se "mueve" a su manera y seleccione cada ingrediente para armar su malteada”, aseguran.
Y aunque todo parece ser perfecto, tan solo por el hecho de ser sus propios jefes, emprender tiene muchas más responsabilidades de las que cualquiera se imagina, “es que somos dueñas de nuestro propio tiempo, el cual tenemos que saber distribuir y aprovechar al máximo para que logre tener resultados y éxito”, además tienen claro que es indispensable “escuchar, dirigir y delegar funciones a nuestros trabajadores que son parte fundamental del núcleo de Shake It Out, sin ellos esta tarea sería más difícil”.
El apoyo familiar ha sido indispensable, desde el primer momento en que visualizaron este sueño, fueron apoyadas e impulsadas a hacerlo realidad. “Eso es muy importante, cuando nos sentimos apoyadas dijimos como, listo, hagámosle, tenemos lo más importante que son las ganas, la idea y a nuestra familia”.
“Amamos a Neiva”
Tienen claro que las razones que mueven a cada persona a ser emprendedor, a escoger un lugar, una temática, una idea y cada uno de los componentes de una empresa, son diferentes y personales, pero sin duda “nosotras desde hace mucho tiempo queríamos crear nuestra propio negocio, hacer algo diferente, único e innovador y que mejor escenario que la ciudad que nos vio crecer … nos pareció muy importante poder hacer realidad nuestros sueños y del mismo modo estar contribuyendo en el crecimiento económico de Neiva, creemos mucho en la gente opita”.
Es así como tras ocho meses de trabajo arduo y continuó, Sandra Carolina Hernández y Daniela Casadiego aseguran estar cumpliendo uno de sus sueños y apoyan e incentivan a quienes tengan la idea de ser emprendedores a hacerlo porque el momento es ahora. “Comenzar es el primer paso para emprender, que se atrevan y crean en ellos mismos, aunque el miedo, la incertidumbre y las preguntas los invadan a realizar su proyecto. Nunca sabremos cuál es el mejor momento por eso nosotras pensamos que el momento es ahora, donde la gran responsabilidad es nuestra. Y por último nunca dejen de soñar, nuestros objetivos y metas se pueden realizar si trabajamos fuertemente en ellos”.
Para quienes aman el talento opita, el emprendimiento y disfrutan del trabajo independiente, pueden visitar esta empresa, apoyar a estas jóvenes y conocer este modelo de negocio. Están ubicadas en la calle 8 # 29ª – 16 barrio Prado Alto.
Malteada de Ferrero Rocher.