El nuevo comandante de la Novena Brigada del Ejército, el coronel Henry Herrera, hace una ‘radiografía’ de las estructuras criminales que asedian al Huila y de los golpes que están recibiendo. Reconoce que las extorsiones siguen y pide a los huilenses no pagar. “El mal ante el bien, al final, es cobarde. Alias ‘Chuky’ no fue tan valiente cuando enfrentó al Ejército y terminó muerto”, dice.
Jesús Antonio Rojas Serrano
“A los soldados les he dicho: capturamos o dimos de baja a un futuro Pablo Escobar porque con edades tan cortas ya generaban terror e intimidación”. Así se refiere el nuevo comandante de la Novena Brigada del Ejército, el coronel Henry Herrera, a los recientes golpes que las autoridades le han dado a las disidencias de las Farc en el Huila.
¿Cuál es su mayor desafío al frente de la Novena Brigada del Ejército?
El gran reto es mantener la seguridad, la estabilidad y tranquilidad a lo largo y ancho del departamento del Huila, en sus 37 municipios, en la parte rural, urbana, en las dos inspecciones de Balsillas y Guayabal del municipio de San Vicente del Caguán, Caquetá, y en el corregimiento de San Juan de Villalobos, departamento del Cauca.
¿Cómo recibe la región en materia de seguridad?
Jesús Antonio, recibimos la ciudad de Neiva golpeada por extorsiones, pero ante lo cual hemos sido contundentes en la respuesta militar. La mejor forma de golpear las extorsiones es golpeando las estructuras armadas de las organizaciones criminales. Entendemos el temor, pero le hemos pedido a la gente que no pague. Al efectuar estos pagos, los comerciantes y empresarios están oxigenando a estas estructuras criminales. Hemos evidenciado que pueden recaudar más de 500 millones de pesos mensuales. Con la captura de ‘Jhonny Vásquez’, evidenciamos que han recaudado de los huilenses más de 4 mil millones de pesos. Y con esto lo que hacen es incrementar su capacidad armada, de intimidación, de consecución de artefactos explosivos. Hemos demostrado que tenemos buena capacidad operacional para golpear todas estas estructuras.
Coronel Herrera, ¿cuál es la radiografía hoy de la distribución de estas estructuras criminales en el Huila? ¿Qué informes tiene inteligencia militar?
Al oriente del departamento, límites entre el Meta y Caquetá, el Bloque Jorge Suárez Briceño. Está la estructura Darío Gutiérrez al norte y en la parte centro y sur, en municipios como Garzón y Guadalupe, la estructura Iván Díaz. Estas estructuras no están en el interior del Huila; se encuentran normalmente en el límite fronterizo. Lo que nosotros hacemos es una operación de contención para evitar que todas estas estructuras armadas ingresen al departamento del Huila. No tenemos la capacidad de tener una presencia permanente y constante en todos los límites departamentales, pero sí desarrollamos tareas de estabilidad, controles de área activos y una alta movilidad que nos permite ser un muro de contención al oriente de este Bloque Jorge Suárez. Al occidente, está el Bloque Jacobo Arenas a través de las estructuras Dagoberto Ramos, que hace presencia más en el Cauca, e Ismael Ruiz, que hace presencia en los límites entre los departamentos de Cauca, Valle del Cauca, Tolima y Huila. A estas estructuras se suma el nuevo Bloque Isaías Pardo, cuya intención es que esté en el Huila. Ante la contención que estamos haciendo, ellos manejan comisiones, algunas sin armas, pero con un alto poder intimidatorio, manejan el léxico y son un puente entre la estructura armada y ellas para presionar los pagos extorsivos.
¿Qué sabe el Ejército de qué tanta presencia hay de las disidencias de la Segunda Marquetalia al mando de ‘Iván Márquez’ en Algeciras y el oriente del Huila?
Tenemos unas informaciones de inteligencia que estamos tratando de puntualizar. Hay información que es de conocimiento público, pero hay otra que estamos trabajando. Lo que vemos es que se mantiene la intención de la Segunda Marquetalia, de la Teófilo Forero, de volver a retomar sus antiguos corredores estratégicos y tácticos. Si miramos la ubicación de las estructuras de los grupos armados organizados residuales es similar a la que tuvo las Farc en tiempos anteriores.
¿Hay presencia hoy de guerrilla del Eln en territorio huilense?
No. No tenemos una presencia armada en el Huila. Pero, Jesús Antonio debe entender que el Eln es más social, más ideológico, más político. Entonces, puede haber estructuras o personas que mantengan afinidad con esta estructura.
Dentro de la ‘explosión’ de grupos ilegalmente armados en el país hay uno que se llama Comandos de Frontera, ¿el Ejército sabe si esté grupo está delinquiendo en el Huila?
No. Jesús Antonio, en estos momentos no tenemos presencia activa de Comandos de Frontera. Ellos intentaron hacer un ingreso por el sur del Huila, pero fue desarticulada toda esta comisión. Hubo 7 capturas con su material de guerra y ya cesaron en su intención. Tanto los grupos armados organizados residuales como estas estructuras de la Segunda Marquetalia, Teófilo Forero y Comandos de Frontera, han querido ingresar o mantener un control en el Huila por la rentabilidad que pueden obtener.
Coronel Herrera, ¿qué tanto estas estructuras criminales están extorsionando?
Se mantiene. En las capturas que hemos hecho y el material probatorio que pasa a la Fiscalía General de la Nación, estamos viendo que la gente, presa del temor, está pagando extorsiones. Recalco: la invitación es a que no caigan en las intimidaciones de estos grupos criminales. Los empresarios que han denunciado han visto que hemos sido muy efectivos y contundentes contras estas estructuras criminales y las hemos golpeado en profundidad.
¿Tiene el Ejército una directriz clara de atacar de manera directa los grupos ilegalmente armados?
Nosotros mantenemos en el Huila el cese al fuego en los diálogos de paz que desarrolla el Gobierno Nacional, pero no renunciamos a brindarle la seguridad al departamento en casos de flagrancia, de violación al cese al fuego. Por eso, mantenemos un control territorial en todo el departamento. En este 2024, se han presentado 11 combates, con más de 65 afectaciones a estas estructuras criminales, entre capturas, menores recuperados, sometidos, desmovilizados y muertos en desarrollo de operaciones militares.
¿Están las autoridades trabajando coordinadamente para enfrentar la amenaza de las disidencias de las Farc?
Claro que sí. Juntos es que somos invencibles. Aislados podemos ser muy fuertes, pero no se darán golpes contundentes. Estamos trabajando muy de la mano con el coronel Castillo, comandante de la Policía Metropolitana de Neiva; con el coronel Téllez, comandante del Departamento de Policía Huila; los comandantes de batallón trabajan muy de la mano con nuestra Policía Nacional, Fiscalía, Cuerpo Técnico de Investigación; con nuestra Fuerza Aérea Colombiana. Estamos trabajando de una manera muy articulada y armónica. Un ejemplo de ello fueron las últimas cuatro capturas que nace de una inteligencia del Ejército Nacional, se comparte esta información con la Policía y el CTI, se logran una órdenes de allanamiento, participando más de 50 efectivos de Ejército, Policía, CTI y Fuerza Aérea para lograr estas capturas en los municipios de Rivera, Villavieja y Aipe.
Coronel Herrera, hemos visto al Ejército patrullando permanentemente las calles de Neiva, ¿Van a seguir con estos planes?
Va a continuar. En un trabajo articulado entre la Policía Metropolitana de Neiva y nuestro Batallón de Artillería 9 Tenerife, estamos apoyando la seguridad de Neiva. La ciudadanía ha visto la presencia activa de nuestra motorizada, de nuestros soldados, de nuestras Fuerzas Antiterroristas Urbanas. Y no solo en Neiva, en Pitalito, La Plata y Garzón. Vamos a continuar.
Volviendo al tema de las extorsiones, ¿Qué tan importantes han sido las recientes neutralizaciones de alias ‘Chuky’ y alias ‘Jhonny Vásquez’?
Muy importantes. Casi todos los volantes de las extorsiones eran autorizados por ‘Jhonny Vásquez’, quien era el segundo cabecilla de la estructura Darío Gutiérrez y a su vez era el que manejaba las finanzas de todo el frente. A él lo capturamos en la inspección de Guayabal, Caquetá, en donde fue sometido por tropas del Batallón de Alta Montaña 9; él era el que daba el permiso para que estas estructuras criminales extorsionaran. Él se apoyaba en los miembros de las comisiones finanzas, entre esos alias ‘Chuky’, quien fue dado de baja; era el que llamaba, intimidaba, enviaba un video, citaba y hacía presencia en las zonas urbanas y rurales. Quiero decirle algo a la gente: el bien siempre triunfa sobre el mal; el mal ante el bien, al final, es cobarde. Por ejemplo, alias ‘Chuky’ no fue tan valiente cuando enfrentó al Ejército y terminó muerto en desarrollo de la operación militar. En reemplazo de ‘Chuky’ estaban preparando al que capturamos con ‘Jhonny Vásquez’ y era el que iba a venir a intimidar a la población civil. Ese golpe fue muy significativo.
Frente a estos golpes, ¿No le ha sorprendido la edad tan corta de quienes están extorsionando a los huilenses?
Total. ‘Jhonny Vásquez’ no pasa de los 23 años de edad. Nos ha generado esa alerta, pero a la vez nos da felicidad de haber cortado de raíz a estos criminales. A los soldados les he dicho: capturamos o dimos de baja a un futuro Pablo Escobar porque con edades tan cortas ya generaban terror e intimidación; tenían un poder negativo ante la población civil. Estos criminales no tienen tanta capacidad militar y convicción como sí la tienen nuestros soldados y, por eso, los hemos golpeado.
¿Qué significan los ejercicios de tiro que ha estado haciendo por estos días el Ejército en pleno desierto de La Tatacoa?
En el marco del Plan Ayacucho, tenemos cuatro pilares: el primero, proteger a la población civil; el segundo, derrotar las capacidades de la amenaza; el tercero, garantizar la gobernabilidad; y el cuarto, mantener las capacidades propias de la fuerza. Dentro de estas capacidades propias de la fuerza, manejamos tres líneas especiales: operaciones especiales, seguridad en área extensa y la capacidad de maniobra de armas combinadas, entre ellas la artillería. Hemos estado disparando ocho sistemas a distancias de 14 y 18 kilómetros. El objetivo es mantener nuestras capacidades para que en el caso en que se requieran, tener la pericia y la contundencia en su empleo.
Como comandante de la Novena Brigada del Ejército, ¿cuál es su mensaje a los huilenses?
Mi mensaje a todos los huilenses es que confíen en su Ejército Nacional, en su Policía Nacional, en su Fuerza Aérea Colombiana. La razón de ser de los soldados es el servicio. Y ese servicio va enfocado a la defensa de los huilenses, al uso legítimo de las armas. Queremos que el Huila sea muy próspero. El llamado a los empresarios es a que se mantengan en la región.
A través de LA NACIÓN, ¿qué mensaje les envía a sus tropas?
Para todos los oficiales, suboficiales, soldados profesionales, a los soldados que están prestando su servicio militar, a la inmensa mayoría que se encuentra desplegados a lo largo y ancho del departamento, lejos de sus familias, en condiciones difíciles, les envío todo mi cariño y respeto y mi agradecimiento. Es un honor ser el comandante de los más de 4.500 hombres que integran esta Novena Brigada. Dios los bendiga. Debemos actuar siempre bajo la legitimidad, la legalidad y la constitucionalidad. Ustedes son el orgullo, el amor y la esperanza de sus esposas, hijos y sus padres. Manténganse fuertes, con la moral en alto, con inmensa fe en la causa, que el pueblo huilense los quiere, los respeta y les valora su servicio. Honor y gloria para ustedes, soldados de Colombia.