Tras estar 30 días en cautiverio en poder del Frente Hernando González Acosta de las disidencias de las Farc, fue liberada la comerciante Ángela Valentina Gómez Campos en el corregimiento Río Chiquito en Páez, Cauca. Hasta anoche la mujer aún no se había encontrado con sus familiares en La Plata, Huila.
Las noches de ‘infierno’ no solo terminaron para Ángela Valentina Gómez Campos, sino también para toda su familia que vivió un verdadero viacrucis desde su secuestro el pasado 11 de septiembre, cuando salía de la finca que había tomado en arriendo para desarrollar su proyecto piscícola financiado por el Fondo Emprender del Sena.
Las plegarias de sus seres queridos se hicieron realidad tras estar 30 días en cautiverio en poder de las disidencias de las Farc. La noticia de su liberación fue confirmada ayer por el coronel Carlos Eduardo Téllez Betancourt, comandante del Departamento de Policía Huila, quien indicó, “en horas de la madrugada en el sector de Río Chiquito, jurisdicción del departamento del Cauca, fue liberada la joven Ángela Valentina Gómez Campos, la cual estaba retenida en contra de su voluntad desde el pasado 11 de septiembre en zona rural de La Plata, Huila”.
El alto oficial no entregó muchos detalles al respecto, sin embargo, sí afirmó que se encontraba bien de salud. “Nuestro grupo Gaula Militar y de Policía continúan la investigación de este caso con el fin de dar con la captura de los criminales que realizaron el secuestro”.
La entrega
Parientes de Gómez Campos, precisaron a LA NACIÓN, que la entrega de la huilense estaba programada para la medianoche del jueves, pero finalmente se confirmó que estaba libre en horas de la madrugada de ayer en el municipio de Páez, Cauca.
Una llamada de la empresaria llenó de emoción a su familia al pedir que fueran por ella al centro poblado de Pacarní, Tesalia. Se sabe que, desde el Cauca, se trasladó a jurisdicción del Huila, para que retornara a su hogar.
Lágrimas de felicidad
“Solo un minuto logramos hablar con ella, nosotros le preguntamos cómo estaba y dijo que bien, y se escuchaba que estaba bien, no sabemos más, simplemente nos dijo por favor recójanme acá, llorando de la felicidad”, manifestó su hermano.
Desde la primera comunicación se dispusieron a viajar para recogerla, pero hasta la noche de ayer la mujer aún no se había reencontrado con sus padres. “No nos hemos visto con ella, sabemos que está en Pacarní, no sabemos cómo llegó hasta allí ni nada, simplemente nos informaron que la habían liberado”, añadió su familiar.
El coronel Jaison Leonardo Gómez Pérez, jefe del Estado Mayor y comandante encargado de la Novena Brigada, precisó a este medio de comunicación que no intervinieron en ese proceso e indicó que continúan prestando apoyo a las víctimas. “Estamos en conversaciones con la familia pata determinar unos temas de seguridad”.
Cabe recordar que el grupo armado ilegal venía exigiendo una fuerte suma de dinero a cambio de la liberación de la comerciante. Estos delincuentes utilizaban videos como muestra de supervivencia en donde no solo se le veía demacrada, sino también se denotaba su sufrimiento a raíz de que la hacían suplicar para que le respetaran su vida, esto como estrategia para presionar a sus allegados.
Su pretensión era que accedieran al canje humanitario, pero su familia aseguró que nunca hubo una negociación.
El secuestro
Toda esta incertidumbre inició el día en que ella conducía su vehículo Kia Río color blanco, por un sector conocido como vía Museñas, en zona rural de La Plata. Allí fue interceptada por un grupo armado que la plagió en el mismo automotor.
Desde ese entonces el miedo y la zozobra agobió a sus padres y demás seres queridos que temían por su vida. La comerciante de 27 años había quedado en poder del Frente Hernando González Acosta del Bloque Central Isaías Pardo de las disidencias de las Farc.
El secuestro se confirmó una vez que el grupo subversivo empezó a comunicarse con la familia para exigir el pago del dinero.