Edelberto de la Ossa Chávez
En los países desarrollados, la educación es el motor más importante de su libertad y estabilidad; es de alta calidad y de amplia cobertura, su gente es madura, con un proyecto de vida claro e independiente ideológicamente y en la toma de decisiones, pensando en el bien común. Sus expresidentes hacen uso del buen retiro, se dedican a cuidar a su familia, a ayudar a criar a sus nietos, a recorrer el mundo dictando conferencias, devengado buenos honorarios, y a cero intervención en política; los congresistas se dedican a legislar a favor de las regiones o de los Estados Federales que los eligieron, para beneficio de la comunidad en general y con ello conseguir su desarrollo integral y bienestar de sus habitantes, y los jueces se dedican, única y exclusivamente, a administrar justicia pronta y cumplida; los miembros de las altas corte son de carácter vitalicio.
En los países en vía de desarrollo, como nos gusta que nos llamen, en cuanto al derecho constitucional fundamental de la educación, nos falta mayor implementación ya que este, no tiene la cobertura que se requiere en todo el territorio nacional. Nuestra gente no tiene un proyecto de vida, somos fanáticos y fáciles de manipular; nuestros expresidentes salen graduados de jefes de partidos o movimientos políticos o a crear nuevos partidos, son 100% políticos. Esto ocurre casi en toda Latinoamérica, impidiendo el nacimiento de nuevos líderes sociales y políticos. Los congresistas una vez elegidos, solo piensan como serán reelegidos, olvidando su compromiso social y político con el pueblo que los eligió (aunque existen algunas excepciones); la justicia es ecléctica en sus funciones, hace de todo un poco, pero con respecto, al cumplimiento de administrar justicia es considerada lenta e insuficiente.
Hacer comparaciones resulta, en muchos casos, detestable, pero a veces es necesario concebirlas para mirar la situación política, económica y social de nuestras comunidades y de los vecinos regionales. Hay que buscar las estrategias necesarias para salir también adelante y hacer de este País un territorio prospero. Para enderezar su rumbo, necesitamos realizar en mi querida Colombia grandes transformaciones políticas, económicas y sociales, una verdadera reforma estructural en todos los campos, iniciando por el cambio de actitud de nuestros compatriotas. pero especialmente, en todas las ramas de los poderes públicos; una re-ingeniería total, dándole a cada una su verdadera dimensión para que ejerzan sus propias funciones, sin inmiscuirse en actividades o tareas de las otras; principalmente tocar temas que son de vital importancia para el desarrollo de nuestra gente. La educación y una verdadera distribución de la riqueza, serían los temas a darles prioridad dentro de una verdadera transformación, ítems que son la columna vertebral del desarrollo de un país.
Si miramos las estadísticas actuales de pobreza, siguiendo las estadísticas del DANE, encontramos las siguientes cifras: 37,5 % de pobreza monetaria en el año 2019, y por la pandemia del covid 19, se han alcanzado niveles del 47% a 49%, es decir, un aumento del 9.50% al 11.50%; lo que mide el costo de las necesidades básicas (Alimentación, alojamiento, transportes y servicios públicos), y si sumamos los índices de pobreza extrema con los de pobreza, encontramos que corresponde al 51.5% de los habitantes del territorio colombiano.
Colombia es un país en donde sus habitantes tienen una pobreza monetaria altísima, como consecuencia, se vuelven caldo de cultivo para los movimientos al margen de la ley, por eso necesitamos llevar a cabo las grandes transformaciones del Estado para mejorar la calidad de vida y desterrar la violencia de los hogares y gritar a cuatro vientos, que somos un país libre y donde solo reina la paz, la tranquilad y la esperanza.
En el pasado, existieron civilizaciones que son ejemplo de desarrollo y de buen gobierno, ¿por qué no tomar esos modelos? estudiando el pensamiento y la ideología del Imperio Inca, se puede evidenciar que con sus normas y procedimientos podríamos salir adelante. Mis lectores, los que deseen, con gusto les puedo enviar el video del Imperio Inca para que lo analicen y reflexionemos, salvemos nuestra patria, querida tierra hermosa y exquisita.
“El secreto de la libertad radica en educar a las personas, mientras que el secreto de la tiranía está en mantenerlos ignorantes”. Maximilien Robespierre, quien fue un abogado, escritor, orador y político francés, apodado «el Incorruptible». Fue uno de los mas prominentes líderes de la Revolución Francesa.
Hasta una próxima oportunidad.