En septiembre del año pasado personal de EPN rompió las calles, con el fin de instalar las redes de aguas lluvias y las zanjas no las taparon, quedando las vías destrozadas y llenas de escombros. La comunidad asegura que Canaima se quedó sin calles de acceso. En septiembre del año pasado personal de EPN rompió las calles, con el fin de instalar las redes de aguas lluvias y las zanjas no las taparon, quedando las vías destrozadas y llenas de escombros. La comunidad asegura que Canaima se quedó sin calles de acceso. LA NACIÓN, NEIVA Los residentes en el barrio Canaima dicen que llevan cuatro meses esperando que las Empresas Públicas de Neiva (EPN), envíen obreros con el fin que dejen las calles del barrio arregladas, las cuales quedaron destruidas tras los trabajos de instalación de las tuberías para las aguas lluvias. Las familias informaron a LA NACIÓN, que en septiembre del año pasado llegaron al barrio trabajadores de EPN con el fin de instalar las redes. Según ellos, las calles en ese momento se encontraban en buen estado, pero los obreros rompieron las vías, instalaron las tuberías y medio taparon las zanjas y a la fecha las los tramos están intransitables, los escombros que quedaron de las obras se ubican a lo largo de las vías. José Ignacio Puentes, residente del barrio, manifestó que la vía más afectada es la Calle 25 Sur con Carrera 23A, por donde rompieron las calles y quedaron las zanjas junto con todos los desechos que los dejaron regados por las calles. “Vinieron al barrio los empleados de EPN a cambiar el alcantarillado de aguas lluvias que no tenía Canaima. Eso fue el año pasado en septiembre, hicieron los trabajos y dejaron todo a medias” dijo Puentes. Entonces la gente aprovechando que las zanjas están destapadas y con los escombros que salen de las construcciones de las nuevas casas las tapan, “pero esa no es la solución, porque cuando llueve todo ese material el agua lo arrastra”. “Los obreros que instalaron los tubos nunca más volvieron al barrio a dejar las calles organizadas y esto afecta la movilidad y la estética del sector”, acotó Alejandra Peñaloza, una ama de casa de Canaima. Lo peor dicen los vecinos, es que colocaron las tuberías, pero no han construido los desagües en las esquinas, entonces la obra está incompleta. “Esas aguas al no tener por dónde evacuar, provocan malos olores, hay proliferación de zancudos, la gente encima de los escombros arroja basuras”, indicó Carolina Medina, habitante del barrio desde que se fundó hace 12 años. La ruta de los buses Por la calle más afectada cruza la ruta de buses urbanos, lo que empeoró el estado de la vía. Los conductores manifestaron que el tramo es una trocha y que todas las demás quedaron desbaratas luego del cambio de las redes. Los vecinos manifestaron que la junta estuvo recogiendo firmas con las familias para solicitarle al Alcalde de Neiva una solución al arreglo de las calles. Lucero Saavedra, habitante, indicó que las zanjas abiertas afectan la entrada de los carros y las personas a las viviendas. “Todas las entradas a Canaima están terribles, pero la más afectada es la 25 Sur. Con las calles dañadas los buses urbanos no quieren entrar y la gente se queda a varias cuadras de las casas. Las tres entradas a Canaima son intransitables”, acotó la señora Saavedra. Los vecinos se cansaron que los obreros de EPN lleguen a romper las calles que se encuentran en buen estado y las dejen llenas de huecos, que causan accidentes especialmente en las noches.