Angie Valentina González Tovar, murió luego de haber ingerido una gran cantidad de antidepresivos tricíclicos. La menor fue auxiliada, trasladada a un centro médico, pero pese a los esfuerzos falleció. El hecho se presentó en el barrio San Antonio, en el oriente de Neiva.
Dolor y tristeza sienten los familiares de Angie Valentina González Tovar de 15 años de edad, quien tomó la decisión de acabar con su vida; pese a los esfuerzos médicos, la sustancia ingerida afectó notoriamente el organismo de la joven, y murió.
El lamentable suceso se presentó en el interior de la vivienda de la víctima, ubicada en el barrio San Antonio, en el oriente de la ciudad de Neiva, donde fue encontrada por su progenitora, en pésimas condiciones.
Según las primeras versiones, la adolescente ingirió amitriptilina, que es un antidepresivo tricíclico y un analgésico. El medicamento lo consiguió al parecer por medio de algunas amigas.
Auxiliada
Angie Valentina, fue trasladada de inmediato al Hospital Universitario de Neiva, donde los médicos le realizaron todos los procedimientos necesarios, pero al parecer, la sustancia había hecho tal efecto, que la menor se encontraba en estado de coma.
Los galenos le notificaron a la madre de la menor, que la vida de la joven no se podía salvar. La causa, muerte cerebral. Sin embargo, este doloroso momento no termina ahí, pues adicionalmente le indicaron que su hija había fallecido supuestamente por covid-19.
La situación inquietó tanto a la mujer, que puso en conocimiento a la Personería de Neiva, y fue necesaria la intervención de esta entidad, para lograr esclarecer este suceso, que además, se complicaba cada vez más para la entrega del cuerpo y el presunto diagnostico que le habían entregado.
Hipótesis
Con relación a las posibles causas que llevaron a la joven a tomar la fatal decisión, sus familiares indican que puede tener relación con las calificaciones y el bajo rendimiento que tenía en el colegio, pues al parecer, sus malas notas, y el proceso de las clases virtuales generaba en ella un estrés al no entender; sumándose, el desespero por estar encerrada en su hogar.
Amigos, y familiares de Angie lamentaron lo acontecido, la menor gozaba de gran aprecio entre su círculo más cercano. Allegados la recuerdan como una niña alegre y carismática.