BERLÍN (AFP) – La canciller alemana, Angela Merkel, abogó por reforzar la unión política europea, una propuesta a largo plazo que frustra los reclamos de muchos de sus socios por soluciones urgentes a la crisis de la deuda, en momentos en que España se tambalea. BERLÍN (AFP) – La canciller alemana, Angela Merkel, abogó por reforzar la unión política europea, una propuesta a largo plazo que frustra los reclamos de muchos de sus socios por soluciones urgentes a la crisis de la deuda, en momentos en que España se tambalea. Merkel, férrea partidaria de los ajustes presupuestarios, admitió sin embargo que el Pacto Fiscal no era la panacea absoluta para reactivar a las maltrechas economías europeas, en una conferencia conjunta con el jefe del gobierno británico, David Cameron. “Necesitamos más Europa (…), una unión presupuestaria (…), y necesitamos antes que nada una unión política. Debemos paso a paso transferir competencias a Europa”, sobre una base voluntaria, dijo Merkel en declaraciones televisivas. Ese camino abre la puerta a una Europa a dos velocidades. “No debemos quedarnos inmóviles porque uno u otro no quiere todavía seguir” esa orientación, subrayó la jefa de gobierno de la principal potencia económica del continente. Merkel echó además paños fríos a quienes esperan que la cumbre de la Unión Europea (UE) de fines de junio en Bruselas constituya una etapa decisiva en la solución de la crisis que ya obligó al rescate de Portugal, Irlanda y Grecia -un país que está además al borde de salir de la Eurozona- y tiene en la cuerda floja a España. No hay ninguna cumbre “capaz de solucionarlo todo de golpe”, aclaró. Una aclaración que será sin duda de poco consuelo para España, que se dio un plazo de quince días para decidir si pide ayuda a Europa para recapitalizar a sus bancos. La presión de los mercados volvió a hacerse patente este miércoles, cuando el Tesoro español tuvo que ofrecer rendimientos en alza, por encima del 6%, para financiar su deuda con obligaciones a diez años. El interés de esos títulos llegó a 6,044%, frente al 5,743% de la última emisión similar. Alemania consigue en cambio financiarse a niveles históricamente bajos (de 1,357% en los mercados de deuda), por gozar de la confianza de los inversores. El recelo ante España se debe a la fragilidad de su sector bancario tras el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008, que paralizó su economía y sumió en la desocupación a casi un cuarto de la población activa. La agencia de calificación financiera Standard & Poor’s estima que los bancos españoles tendrán unas pérdidas acumuladas de 80.000 a 112.000 millones de euros de aquí a 2013, y que tienen cada vez menos posibilidades de escapar a un pedido de ayuda. Merkel reiteró además sus llamamientos a no aflojar los programas de severos ajustes fiscales, pese a las críticas que estos despiertan en sus socios, que los ven cada vez más como un factor de asfixia de sus economías. “La consolidación presupuestaria y el crecimiento son las dos caras de una misma moneda”, sentenció la canciller. Esos propósitos fueron sin embargo matizados en una rueda de prensa conjunta con Cameron, cuando ambos se refirieron al Pacto Fiscal firmado por 25 de los 27 países de la UE para reforzar la disciplina presupuestaria (uno de los no signatarios es Gran Bretaña y el otro la República Checa). “El Pacto Fiscal puede ser un elemento importante, pero no es suficiente” para resolver la crisis, dijo Cameron. “Es una condición necesaria pero no suficiente”, convino Merkel. Presión sobre Alemania Alemania enfrenta una fuerte presión de países externos a la zona euro, como Estados Unidos y Gran Bretaña (que pertenece a la UE pero no al bloque monetario) para facilitar la adopción de medidas urgentes. El presidente estadounidense, Barack Obama, y el propio Cameron llamaron el miércoles a lanzar un “plan inmediato” para resolver la crisis de la zona euro. Francia, principal socio de Alemania en la Eurozona, también reclama iniciativas con rápido impacto, como la emisión de eurobonos que permitirían mutualizar la deuda de varios países y rebajar así los intereses que pagan los socios más débiles. Europa se halla además ante dos citas políticas clave el próximo 17 de junio: las elecciones legislativas en Grecia y en Francia. En Grecia, se trata de una repetición, después de que los partidos favorables a los ajustes quedaran en minoría en los comicios del 6 de mayo y no consiguieran formar gobierno. En Francia, la izquierda tratará de asegurar una mayoría a la aplicación del programa del recién elegido presidente socialista François Hollande. El ministro francés de Economía, Pierre Moscovici, propuso el miércoles una “recapitalización directa de los bancos” por parte de los fondos de rescate de la Eurozona, en particular el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) que entrará en vigor el 1 de julio, en sustitución del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF). La canciller alemana, Angela Merkel, y el jefe del gobierno británico, David Cameron. Foto Afp