‘Uribe fue mejor presidente que ex presidente’

El ex presidente Ernesto Samper Pizano, que se reúne hoy con jóvenes del Huila, visitó ayer LA NACIÓN y conceptuó sobre algunos aspectos de la polémica actualidad colombiana. El ex presidente Ernesto Samper Pizano, que se reúne hoy con jóvenes del Huila, visitó ayer LA NACIÓN y conceptuó sobre algunos aspectos de la polémica actualidad colombiana. NELSON ROJAS OSORIO LA NACIÓN, NEIVA En  medio de las diferencias políticas que viven hoy el presidente Juan Manuel Santos y el ex presidente Álvaro Uribe, el también ex mandatario liberal Ernesto Samper Pizano declaró que es bueno que cada uno defienda sus espacios porque eso le da dinámica a la política colombiana. Dijo Samper que Álvaro Uribe logró importantes resultados en materia de seguridad y que fue un buen presidente, pero que como ex presidente (Uribe), no le gusta que esté tratando de politizar el orden público de este país. Ernesto Samper se reunirá hoy con jóvenes huilenses para tratar diferentes temas de la actualidad regional y nacional (ver recuadro) ¿Qué opina de lo ocurrido con el diputado Sigifredo Vargas? Es como una telenovela trágica que afortunadamente tiene un final feliz. Nunca los amigos de Sigifredo dudamos respecto a su conducta o comportamiento y da tanta felicidad la noticia de su liberación, como el coraje del fiscal por ser justo, en un país donde se ha generalizado la injusticia y eso me parece que es muy importante de destacar. ¿Queda evidenciado así un cartel de testigos falsos? Efectivamente creo que la justicia colombiana debe empezar a revisar esta máquina diabólica que se ha venido montando, de personas en busca de beneficios que van ensuciando y denunciando y comprometiendo honras sin ton ni son, y sin tener nada que perder, hasta el punto que le da a uno la impresión de que en este país los villanos se volvieron héroes y la gente de bien se volvieron villanos. ¿Tenemos en frente una Fiscalía débil y poco operativa? La Fiscalía está haciendo tránsito hacia un sistema acusatorio que creo que no está acabado de inventar. En buena parte, las dificultades que se están viviendo con estos casos tienen que ver con un procedimiento escrito del que no acabamos de salir y no hemos entrado a las garantías un sistema oral. Habrá que entrar a revisar esos temas, pero en todos los países existe un fenómeno preocupante de la politización de la justicia y de la judicialización de la política. ¿Es el Marco para la Paz el camino para los diálogos con las Farc? Yo no creo, la paz no es algo que se dé mágicamente, la paz hay que construirla. Este país lleva 50 años enfrentado y cualquier posibilidad tiene que nacer de un proceso que tiene que ser rápido, discreto y eficaz. No podemos volver a los errores del pasado, como El Caguán o agendas interminables. Tenemos que hacer una paz concreta y eficaz. Uribe logró cambiar la confrontación de fuerzas entre las Farc y las Fuerzas Militares a favor del Estado colombiano. Esa coyuntura se debe aprovechar para buscar una salida política al conflicto armado y ojalá la encuentre el presidente Santos.  Las Farc han pasado de una posición ofensiva a una posición defensiva y eso es un avance importante. ¿Pero el mismo Uribe es obstáculo para la búsqueda de esa Paz? No es un obstáculo, está incursionando en un campo muy delicado, en los cuáles no habíamos caído en el pasado, que es el debate político sobre el orden público. No se puede politizar el orden público, ni se pueden politizar las acciones militares, ni se pueden hacer evaluaciones políticas de los resultados de combate, porque ese es el camino más corto para que terminemos despedazándonos todos. Pero fíjese que hasta con el presidente Chávez mantiene una fuerte disputa verbal Uribe ha roto todos los moldes, es un personaje ‘sui generis’, fue mucho mejor presidente que ex presidente. En el caso de Venezuela, le está ayudando muchísimo a Chávez porque a nadie le gusta que se le metan en la cocina a opinar, cada país tiene sus procesos internos y son los venezolanos los que tienen que resolver esa situación. ¿Santos debe marcar una división inmediata con Uribe? No, para nada, a mí me encanta lo que está pasando, la posición de Uribe de defender una posición de centro derecha es totalmente respetable como lo puede ser la posición de Santos, defender una posición de centro. Eso me parece que la da mucha claridad a la política. Ahora todos estamos pendientes de ver si Uribe se da un beso con Santos o no, la política no funciona así. Uribe representa un espacio, Santos representa otro y ojalá que la izquierda encuentre su espacio. Lo demás es retórica de coctel. ¿Qué paso debería dar las Farc para demostrar verdaderos hechos de paz? Eso es solamente con buena voluntad. La guerrilla debería embarcarse en un acuerdo humanitario como el que hemos propuesto y enmarcado en cuatro temas: sacar a los niños de la guerra, adelantar un proceso de desminado de los campos, evitar escudarse con la población civil, especialmente en hospitales y escuelas, y que sea una realidad aquella propuesta de que no vuelven a secuestrar. ¿Cómo observa el problema de El Quimbo? Yo tengo confianza en que se va a lograr un punto medio en todo el proceso donde se pueda lograr finalmente un  proyecto de desarrollo sostenible. Colombia defendió en Rio de Janeiro que el medioambiente había que protegerlo sin sacrificar las posibilidades del desarrollo y es tan significativo el desarrollo del Huila con El Quimbo, pero es importante que no se haga pasando por encima de los protocolos ambientales y de defensa social, pero es tarea de los huilenses encontrar ese espacio para que se pueda consolidar un proyecto productivo y que yo impulsé en mi gobierno, pero sin costos sociales ni ambientales. ¿Qué opina del nuevo Sistema de Regalías adoptado en Colombia? Malo. Pedirle a una región que pague unos costos ambientales, sociales y que además reciba unas cuantías mínimas, me perece que es un suicidio. No soy un amigo del proyecto de regalías, me parece que es una medida totalmente centralista, porque sacó todos los recursos de las regiones y los está concentrando en una olla que no se sabe para dónde va y creo que si no se le devuelven a las regiones no va a ver un solo gobernador de estas regiones que salga a defender los proyectos a este nivel. Ernesto Samper Pizano en su  visita ayer a  LA NACIÓN.