‘Vivimos en medio del peligro’

Según los habitantes del asentamiento Bajo Tenerife, la situación de delincuencia y expendio de drogas en el sector es preocupante. El lugar se ha convertido en una de las “ollas” más frecuentadas de Neiva, y lo más paradójico, es que geográficamente se encuentra ubicado en medio de las instalaciones del Ejército y la Policía Nacional. Ante un posible desalojo, las familias piden soluciones de vivienda. Según los habitantes del asentamiento Bajo Tenerife, la situación de delincuencia y expendio de drogas en el sector es preocupante. El lugar se ha convertido en una de las “ollas” más frecuentadas de Neiva, y lo más paradójico, es que geográficamente se encuentra ubicado en medio de las instalaciones del Ejército y la Policía Nacional. Ante un posible desalojo, las familias piden soluciones de vivienda. LA NACIÓN, NEIVA A escasos 100 metros de la entrada a la Novena Brigada del Ejército y a cinco cuadras del Comando de Policía Huila en Neiva, se encuentra una de las “ollas” más visitadas y peligrosas de la ciudad. El sector conocido como asentamiento Bajo Tenerife se halla bajo el puente contiguo a las instalaciones militares y el antiguo puente del ferrocarril. La zona mencionada está ubicada sobre la ribera del río Las Ceibas. Según los habitantes del lugar, en ese punto han proliferado expendios de droga y la situación de delincuencia es complicada. “En el asentamiento Bajo Tenerife convivimos familias de escasos recursos y familias desplazadas y desde hace unos meses, expendedores de droga, consumidores y ladrones. La situación acá ha empeorado desde que algunos de los que fueron desalojados en la Carrera Quinta se trasladaron para el asentamiento, algunos de ellos, los jíbaros que operaban al otro lado y los viciosos e indigentes”, comentó un habitante del lugar que pidió la reserva de su identidad por razones de seguridad. Expendios Según la fuente, de día y de noche el flujo de consumidores que visitan los expendios es constante. “Acá lo que se escucha es que hay cuatro expendios de drogas, la situación es complicada. A cualquier hora usted ve personas llegando a las “ollas” y poniéndose a fumar en cualquier lugar o en el puente. En la noche la situación es más terrible. Desde los ranchos uno escucha a los viciosos pasar haciendo bulla y subidos en el puente de la carrilera fumando vicio. Ya en el puente vehicular y los alrededores es un atracadero muy tenaz”, comentó. Autoridades Para la comunidad, lo más insólito es que este punto de la ciudad, a escasos metros de los cuarteles de la Policía y el Ejército, sea tan problemático. “Parece increíble que muy cerca a las autoridades pasa de todo y no hay control. Cuando los llamamos, no hemos recibido soluciones, lo que ellos dicen es que nosotros debemos colaborar. Imagínese como será si no más con haber hecho una reunión con la Policía amenazaron a unos vecinos”, refirió la fuente. La comunidad comentó que tienen conocimiento de un posible desalojo del asentamiento y esto genera preocupación. “Nos preocupa un desalojo, porque la gran mayoría de familias no tenemos para dónde coger y si eso pasa, quedaríamos a la deriva. Por eso es que pedimos que nos den soluciones de vivienda”, señaló el habitante. Respuestas LA NACIÓN consultó a la secretaria de Gobierno de Neiva Elizabeth Collazos y al subcomandante de la Policía Huila, coronel Rafael Vanegas, y estas fueron sus apreciaciones respecto a la situación presentada. “Tenemos que hacer allanamientos porque se tiene conocimiento que allí hay expendios de droga. Con la Policía vamos a adelantar operativos. Si se llegara a dar un desalojo, las familias desplazadas tendrían derecho a un tratamiento especial. En este momento ya hay una orden del señor alcalde de 200 viviendas dignas para ellos en Bosques de San Luis”, expuso la Secretaria de Gobierno. Por su parte, el Subcomandante de la Policía Huila, precisó: “Estamos estudiando con la administración municipal la forma de limpiar este sector para erradicar los expendios de droga. Hemos hecho operativos y yo le pediría a la comunidad que apoyaran a la Policía Nacional, porque a veces cuando estamos realizando estos planes, algunas personas salen a hacer asonada a la Policía”. Según los habitantes del asentamiento Bajo Tenerife, la situación de delincuencia y expendio de drogas en el sector es preocupante y peligrosa.