La Nación
COLUMNISTAS

Vivir lo que somos. Por Maritza Rocío López V.

Vivir lo que somos conlleva esfuerzo por lograr y mantener el propio equilibro emocional, implica mirar nuestro interior con serenidad y satisfacción.  Lleva a reconocer que la felicidad se construye y fortalece desde el interior, parte de la confianza, estima y valor que se conceda uno a sí mismo. Vivir lo que somos representa pasar por la vida sabiendo quiénes somos, cómo somos, qué somos y qué queremos ser.   Significa comprender que aunque a veces las cosas duelan, todo puede cambiar y que existe siempre una salida a toda situación. Vivir lo que somos contempla no caer en esquemas que da miedo afrontar, que evaden la realidad, la verdad, que impiden hacernos sentir capaces de aceptar quiénes somos realmente y de permitirnos la felicidad. Vivir lo que somos es entender que somos brillantes, talentosos, capaces, bellos y suficientemente inteligentes para aprender de la vida, de los propios errores.  Es no permitirse caer en la inercia de hacerse pequeños o invisibles ante los demás, mucho menos de olvidar la fuerza interior, que permite romper las cadenas del silencio, del miedo e inseguridad ante los demás. Vivir lo que somos implica superar los complejos de inferioridad o grandeza, es vivir aterrizados en la realidad, es liberarse de culpas, señalamientos, rencores o castigos sin fundamento.  Es sorprenderse con las cosas simples de la vida, reconocer en cada una de ellas su grandeza y su utilidad. Vivir lo que somos es tomar las riendas de nuestra vida, no permitir que otros nos manipulen, utilicen ni mucho menos nos hagan blanco de sus agresiones.  Es vivir el presente sin ataduras del pasado, ni la angustia de un futuro que no siempre se puede predecir. Vivir lo que somos es no convertirse en la marioneta, ni en el peón útil de los demás.  Obliga a establecer límites, a frenar de manera clara y contundente, cualquier acto abusivo de aquellos que se creen más que los demás o que necesitan lastimar a otros para afianzar su propia seguridad. Vivir lo que somos implica exigirse a sí mismos para mejorar y cambiar, para superar los errores y fortalecer aquellas habilidades individuales, que permitan llevar una vida enmarcada en el respeto, la tolerancia y el amor hacia sí mismo y los demás.